Miles de personas se movilizaron este viernes en Uruapan para exigir justicia por el asesinato del alcalde Carlos Manzo y un alto a la inseguridad, las extorsiones y la violencia que azotan a la región. La marcha, convocada bajo el lema “Marcha por la Paz y la Justicia”, fue la movilización más grande registrada en la ciudad desde el homicidio del edil, ocurrido el 1 de noviembre.
Vecinos, comerciantes, transportistas, estudiantes, trabajadores municipales y empresarios avanzaron desde la Glorieta de Paseo Lázaro Cárdenas hasta el Centro Histórico, donde lanzaron consignas como “¡Justicia!”, “¡Fuera Bedolla!” y “¡Grecia no estás sola!”, en respaldo a la alcaldesa sustituta, Grecia Quiroz, viuda del edil asesinado, quien asumió el cargo el pasado miércoles.
Durante el recorrido también se declaró un paro general de actividades. Negocios, gasolineras, servicios de transporte y empacadoras de aguacate suspendieron operaciones como muestra de duelo y exigencia de justicia. Los manifestantes portaron camisas blancas o negras, banderas nacionales en color negro, globos y moños de luto colocados en comercios y viviendas.
La marcha fue respaldada por cámaras empresariales, colectivos ciudadanos, colegios de profesionistas y agrupaciones locales como el Movimiento Independiente del Sombrero, del que forma parte el diputado local independiente Carlos Alejandro Bautista Tafolla, quien también participó en la protesta.
El sector aguacatero, uno de los más afectados por el crimen organizado en la región, se sumó a la movilización con trabajadores de empacadoras y productores que denunciaron el cobro de cuotas por parte de grupos criminales.
El 5 de noviembre, Grecia Quiroz rindió protesta como presidenta municipal ante el Congreso local y prometió continuar con la lucha que encabezaba su esposo. “Voy a seguir los pasos de Carlos Manzo, les voy a dejar un Uruapan, un Michoacán y un México que él hubiese querido”, afirmó en su primer mensaje como alcaldesa.

