El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, informó este martes que se logró el decomiso más grande de fentanilo en Sinaloa, con un total aproximado de 1,500 kilogramos de pastillas del opioide. En el operativo, llevado a cabo en distintas localidades de la entidad, también se detuvo a dos personas y se aseguraron dos armas de fuego.
“Aproximadamente 1,500 kilos de pastillas de fentanilo, dos hombres fueron detenidos y se aseguraron armas de fuego. Estas acciones continuarán hasta que disminuya la violencia en el estado,” detalló García Harfuch a través de su cuenta de X.
Operativos en distintos municipios
Fuentes del gobierno de Sinaloa confirmaron que el decomiso fue resultado de operativos realizados por las áreas de inteligencia de la Marina en los municipios de Ahome, Los Mochis, Gabriel Leyva e Ignacio Zaragoza, entre el lunes 2 de diciembre y este martes 3 de diciembre.
El periodista Carlos Loret de Mola, en su noticiero de Latinus TV, también destacó la magnitud de este aseguramiento, que representa un duro golpe contra el tráfico de opioides en una de las regiones clave para su producción y distribución en el país.
Contexto de violencia en Sinaloa
El anuncio del decomiso ocurrió poco después de que García Harfuch arribara a Sinaloa para evaluar la estrategia de seguridad en la entidad, que recientemente ha enfrentado un aumento en los actos de violencia. La madrugada de este martes se registró la explosión de una camioneta en las afueras de Culiacán, un hecho que sigue bajo investigación.
“La violencia en el estado debe disminuir, y estamos trabajando para lograrlo,” reiteró el titular de la SSPC tras su reunión con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, para analizar la situación y coordinar acciones conjuntas en materia de seguridad.
El impacto del fentanilo en México
El fentanilo, un opioide sintético hasta 50 veces más potente que la heroína, ha generado una crisis de salud pública en Estados Unidos y ha colocado a México como un punto clave en su producción y tráfico. Según autoridades estadounidenses, la mayor parte del fentanilo que llega a su territorio proviene de laboratorios clandestinos operados por cárteles mexicanos, quienes lo elaboran con precursores químicos importados principalmente de Asia.
Este decomiso, el mayor registrado hasta ahora en Sinaloa, representa un paso significativo en la lucha contra el narcotráfico y el comercio ilegal de drogas sintéticas. No obstante, expertos señalan que el reto persiste, ya que los cárteles continúan diversificando sus operaciones y adaptándose a las estrategias de las autoridades.
Acciones continuarán
El secretario García Harfuch enfatizó que las acciones de inteligencia y operativos seguirán reforzándose en Sinaloa, con el objetivo de reducir los índices de violencia y golpear las estructuras criminales que operan en el estado. Mientras tanto, las autoridades federales y estatales trabajan en la investigación para identificar posibles conexiones entre los detenidos y grupos delictivos.
El decomiso no solo destaca la importancia de los esfuerzos coordinados entre distintas instancias de seguridad, sino que también evidencia la escala del problema que enfrenta México en la lucha contra el tráfico de fentanilo y otras drogas sintéticas.