El veredicto de culpabilidad en el juicio contra Genaro García Luna sembró temores en la clase política y las fuerzas armadas, sobre todo aquellos que tuvieron algún tipo de relación con el llamado super policía en los gobiernos panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón. Uno de ellos, el actual gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, está siendo vinculado con García Luna en un mensaje que circula en redes.
En ese texto se dice que Durazo fue secretario particular de García Luna, quien fue encontrado culpable de varios cargos de narcotráfico y delincuencia organizada en una corte de Distrito de Nueva York. Esto es falso.
Durazo fue secretario particular pero del Presidente Vicente Fox de 2000 a 2003, un gobierno previo al de Calderón. También fue vocero presidencial de Fox y coordinador de comunicación social de 2003 a 2004.
De acuerdo a su currículum público, Alfonso Durazo se ha relacionado en diversos partidos desde el PRI, PAN, Movimiento Ciudadano y ahora milita en Morena, donde participa desde el 2006.
Durazo fue el primer secretario de seguridad federal del Presidente López Obrador. Dejó el cargo para después contender por la gubernatura de Sonora.
En su trayectoria destaca haber sido el secretario particular del candidato del PRI a la Presidencia, Luis Donaldo Colosio, de 1993 a 1994.
Obviamente esta fallida vinculación circula con fines político- electorales ligados a la sucesión presidencial. Como es del conocimiento público Durazo es también presidente del Consejo Nacional de Morena desde septiembre del año pasado.
El Consejo Nacional de Morena tiene como función elaborar y discutir los reglamentos del partido; sustituir a los integrantes de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia; evaluar el desarrollo general del partido, así como presentar y discutir la plataforma electoral de Morena en cada uno de sus procesos electorales.
¿Ahora bien, ¿de dónde proviene el fuego amigo contra Durazo?
Al respecto se pueden hacer muchas conjeturas pero ubicar al autor intelectual correspondería al propio interesado y su equipo de imagen.
¿Esto puede crecer?
Claro.
Sobre todo conforme avance el ríspido ambiente en la sucesión presidencial de Morena.
¿Y Durazo estaría vinculado a García Luna?
Quién sabe.
En este punto habría que recordar que al asumir la titularidad de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, en el naciente gobierno de AMLO, Durazo separó del cargo a cuatro funcionarios por su cercanía con García Luna
Entonces, Durazo declaró: “Los riesgos de la permanencia de ese personal serían altos porque hay que recordar que, en la cultura política de nuestro país, las relaciones personales se convierten en relaciones políticas y con frecuencia en complicidades, eso es lo que queremos evitar. No podemos ser ingenuos en este tema y sabemos que la red de complicidades se va tejiendo cuando las carreras profesionales crecen de manera paralela, en este caso a García Luna”.
Sin embargo, más de uno señala al propio Alfonso Durazo como una de las personas relacionadas con García Luna, según una entrevista publicada por Infobae
Por ejemplo, el periodista Jesús Lemus, quien publicó “El licenciado”, un libro en el que desnuda a Genaro García, retrato en el que inevitablemente menciona a varios personajes que actualmente ocupan cargos públicos, así como en la iniciativa privada.
“Tuvo mucho que ver (Durazo) en la relación de García Luna con el Cártel de Sinaloa, porque Durazo es de aquella región (noroeste mexicano) y tiene una presencia muy amplia en algunos grupos delincuenciales de aquella zona y también participó, al menos de manera discrecional, en la fuga del ‘Chapo’ Guzmán de la cárcel de Puente Grande, en 2001″, aseguró Lemus a Infobae México.
Precisamente, es en ese asunto que Lemus menciona a Durazo en un fragmento de “El licenciado”.
(…) “La fuga de ‘El Chapo’ del penal de Puente Grande fue negociada y definida —a finales de 2000— con Genaro García, ya coordinador general de la AFI, y Rafael Macedo de la Concha, titular de la PGR”. En esta versión es difícil suponer que los principales actores del gabinete de seguridad, como Santiago Creel Miranda, secretario de Gobernación, Alejandro Gertz Manero, secretario de Seguridad Pública, y Alfonso Durazo Montaño, jefe de la Oficina de la Presidencia, no hubieran conocido el plan de la fuga o al menos no hubieran sido engañados para que se implementara.
Todo lo que Jesús Lemus relata –tanto en su libro como en esta entrevista– lo dice basado en un mar de pruebas y testimonios que reunió para su investigación. Sus fuentes van desde miembros del crimen organizado hasta agentes y exagentes de organizaciones nacionales cercanos a García Luna, así como de la DEA y el FBI.