El Gobierno de México se comprometió a entregar 249 millones de metros cúbicos de agua a Estados Unidos antes del 31 de enero de 2026, como parte del cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, luego de que el presidente estadounidense Donald Trump reclamara el adeudo estimado en 246 millones de metros cúbicos.
La Secretaría de Relaciones Exteriores y el Departamento de Agricultura de Estados Unidos informaron que se alcanzó un entendimiento, sin detallar las fuentes exactas de donde se obtendrá el recurso hídrico. El acuerdo establece que las entregas iniciarán la semana del 15 de diciembre.
“México tiene la intención de liberar 249 millones de metros cúbicos de agua para Estados Unidos (…) Se ha revisado una serie de acciones para cumplir con las obligaciones del Tratado, incluida la retribución oportuna del déficit excepcional del ciclo de agua anterior”, señala el comunicado conjunto.
Estados Unidos consideró que la medida beneficiará a agricultores y ganaderos de Texas, al aplicarse tanto al ciclo actual como al adeudo pendiente del ciclo anterior. El documento también aclara que, en caso de incumplimiento, cada país podrá actuar conforme a sus intereses nacionales, dentro del marco del Tratado.
La Cancillería mexicana negó que se haya violado el acuerdo bilateral, y atribuyó el retraso a una sequía extraordinaria que ha afectado a usuarios de ambos países. Sin embargo, el ex director de la Conagua, José Luis Luege, criticó el acuerdo y señaló que México perdió la oportunidad de solicitar un aplazamiento debido a las condiciones de sequía que persistirán hasta 2026.
Luege advirtió que las presas La Amistad y Falcón, claves para cumplir con el Tratado, están por debajo del 20% y 10% de su capacidad, respectivamente. Agregó que, aunque El Cuchillo y Marte R. Gómez superan el 80% de almacenamiento, forman parte de otra cuenca y su uso implicaría afectar el abasto de agua para Monterrey y los distritos de riego en Tamaulipas.
El acuerdo incluye los siguientes puntos: aplica al ciclo actual y al déficit anterior; reconoce las obligaciones bajo el Tratado de 1944; fija el compromiso de México de liberar 249 millones de metros cúbicos; establece el inicio de entregas el 15 de diciembre y su conclusión el 31 de enero de 2026; y contempla medidas unilaterales en caso de incumplimiento.
