James Sabatino, identificado por autoridades estadounidenses como miembro de la Cosa Nostra en Nueva York, solicitó ante un tribunal federal autorización para convivir y realizar actividades recreativas con Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, debido a los efectos del aislamiento extremo en la prisión de máxima seguridad ADX Florence.
De acuerdo con información publicada por Ríodoce, Sabatino presentó formalmente la petición ante la jueza de distrito Joan Leonard, argumentando que tanto él como Guzmán Loera llevan años sin contacto con otros internos, lo que ha provocado deterioro mental. Según consta en el documento judicial, “las condiciones de aislamiento extremo en que estamos, sin tener contacto con otros presos, destruye a cualquiera”, afirmó el reo.
Ambos están recluidos desde 2019 en la sección conocida como “Las Suites” de ADX Florence, en Colorado, donde permanecen en celdas subterráneas individuales de 12 metros cuadrados, confinados casi 24 horas al día. La comunicación entre ellos se reduce a golpes o gritos breves a través de la pared, debido a que Sabatino maneja parcialmente el español y Guzmán no habla inglés.
El recurso legal, recibido el 13 de noviembre e impulsado por el abogado Israel Encinosa, pide permitir que compartan al menos el horario de recreo, aun cuando continúen separados en áreas distintas, como medida para preservar la salud mental y “darse apoyo mutuo”.
Sabatino lleva más de 20 años en aislamiento casi total. Documentos judiciales previos revelan que ha reportado alucinaciones auditivas, episodios depresivos, ansiedad, convulsiones y dificultades cognitivas, lo que, según su defensa, afecta su capacidad para participar en procedimientos legales. Evaluaciones forenses han cuestionado la magnitud del deterioro, pero su historial médico respalda los síntomas.
La defensa de Guzmán Loera también ha señalado afectaciones mentales por el aislamiento, como ansiedad, insomnio y pérdida de memoria. Actualmente, solo dos hijas del exlíder del Cártel de Sinaloa tienen autorización para visitarlo ocasionalmente, además de una llamada telefónica semanal de 15 minutos.
El área donde están recluidos cuenta con solo cuatro celdas y los patios de recreo son jaulas individuales bajo tierra, rodeadas de muros que permiten ver únicamente el cielo. La única posibilidad de interacción directa sería coincidir en los horarios de recreo.
James Sabatino, originario de Staten Island, inició su historial criminal a los 19 años tras estafar boletos para el Super Bowl haciéndose pasar por ejecutivo de Blockbuster. Posteriormente, cometió fraudes haciéndose pasar por directivo de empresas como Sony, Roc Nation y Viacom, llegando a engañar a hoteles de lujo y figuras del entretenimiento como el rapero Troop Jr. También ha sido condenado por amenazas contra funcionarios, incluido el expresidente Bill Clinton y un juez federal.

