El medio The New York Times publicó este domingo un reportaje en el que plantea la posibilidad de que los cárteles mexicanos sean los próximos objetivos de bombardeos por parte de Estados Unidos, bajo una eventual administración de Donald Trump, luego de recientes ataques a embarcaciones en el Caribe.
En el artículo, firmado por Paulina Villegas y Jack Nicas, se recuerda que Trump declaró en mayo que para él “sería un honor” utilizar fuerzas estadounidenses contra los cárteles. A partir de ello, el texto cuestiona: “¿Podría México, donde algunos de los grupos criminales más poderosos del mundo producen mucha más droga, ser el próximo?”
Tres altos funcionarios del gobierno mexicano, entrevistados bajo condición de anonimato, descartaron preocupaciones inmediatas sobre posibles acciones militares, debido a los avances actuales en migración y combate al narcotráfico. No obstante, uno de ellos reconoció que los bombardeos en el Caribe han encendido una “preocupación a largo plazo”.
Por otro lado, cinco miembros de un cártel consultados por el medio estadounidense aseguraron que no temen una intervención militar de Estados Unidos. Uno de ellos, con operaciones en Culiacán, afirmó: “Eso nunca sucederá. Trump no puede hacer eso (…) No sólo tenemos rutas marítimas, también tenemos terrestres y aéreas. Siempre hay una manera”.
Funcionarios estadounidenses también descartaron una intervención inmediata. Dos altos cargos del gobierno de ese país señalaron que la administración Trump ha optado por trabajar en conjunto con México y que la reciente visita del secretario de Estado, Marco Rubio, confirmó la alineación entre ambas naciones en temas de seguridad.
La publicación subraya que, según un funcionario estadounidense, las amenazas de Trump han llevado al gobierno mexicano a intensificar su lucha contra el crimen organizado, lo cual habría disminuido la necesidad de una intervención directa “al menos por ahora”.
El reportaje concluye señalando que cualquier acción militar estadounidense en territorio mexicano implicaría consecuencias diplomáticas, económicas y políticas graves.