Cercanos al líder nacional del PAN, Jorge Romero Herrera, aseguraron que el partido ha optado por no responder a las descalificaciones del dirigente priista Alejandro “Alito” Moreno, al considerar que esto forma parte de una estrategia de Morena para dividir a la oposición, según reveló el portal PolíticoMX.
Fuentes panistas señalaron que la dirigencia ha dado instrucciones claras: no caer en provocaciones ni confrontaciones mediáticas con el PRI, pese a los recientes señalamientos en los que el líder tricolor llamó “traidores” y “cobardes” a sus exsocios políticos.
En el PAN consideran que entrar en esa dinámica sería “caer en la trampa de la 4T”, que busca ver a la oposición enfrentada mientras el oficialismo avanza sin obstáculos. Por ello, el enfoque actual es evitar disputas públicas y concentrarse en el relanzamiento del partido rumbo a 2027.
Dirigentes cercanos a Romero detallaron que el partido trabaja en una estrategia de fortalecimiento interno y planea movimientos clave en estados como Nuevo León, donde prevén sorprender con candidaturas propias, sin exponerse a ataques gratuitos derivados de las tensiones con el PRI.
Esta postura de cautela se da en medio de una escalada verbal por parte de Alejandro Moreno, quien ha reiterado sus críticas hacia el PAN tras la ruptura de la alianza en algunas entidades, reflejando el deterioro en la relación entre ambas fuerzas políticas.
