Morena definió dos perfiles como opciones para contender por la gubernatura de Sonora en 2027: la senadora Lorenia Valles San Pedro y el presidente municipal de Cajeme, Javier Lamarque Cano.
Fuentes del partido confirmaron que la selección de estos aspirantes responde a una estrategia de paridad de género, aunque señalaron que el criterio principal será la competitividad en las encuestas internas.
“No hay un criterio como tal. En ocasiones, si el antecesor es hombre, se busca que la siguiente sea mujer, pero no aplica siempre, se usa a discreción“, afirmó un dirigente local consultado.
La presidenta Claudia Sheinbaum tendría mayor afinidad con Lamarque, a quien ha calificado públicamente como “mi amigo el presidente municipal”. Por su parte, el gobernador Alfonso Durazo promovía a Paulina Ocaña, jefa de la Oficina del Ejecutivo estatal, como su posible sucesora.
Ocaña es considerada una figura joven dentro de la administración estatal, con trayectoria en medios como exdirectora de Telemax desde los 23 años. Sin embargo, la preferencia de Sheinbaum por otros perfiles habría debilitado esa posibilidad.
Valles San Pedro disputaba su posición frente a Heriberto Castillo, quien recibió apoyo en el Consejo Estatal de Morena en julio pasado, aunque, según fuentes del partido, Sheinbaum retiró su respaldo por presuntas irregularidades.
La dirigencia morenista reiteró que el método de selección en Sonora, como en el resto de los estados donde habrá elecciones, se enfocará principalmente en el resultado de las encuestas de popularidad y viabilidad electoral, por encima del género.
Morena busca definir con anticipación sus candidaturas rumbo a las 17 gubernaturas que estarán en juego en 2027, dentro de las cuales Sonora figura como una de las entidades prioritarias.