Era inevitable, nos hacen ver, que la Marina hablara del tema que en los últimos días ha golpeado fuertemente a la institución. Y fue por eso que el secretario de la Marina, el almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles, tuvo que salir al ruedo y enfrentar al toro como primer orador del acto oficial del desfile del 16 de septiembre. Habló del golpe de timón que ese instituto armado tuvo que dar para desviar el rumbo del barco, que desde el sexenio pasado navegaba en las aguas de la corrupción. Y lanzó un mensaje y un fuerte compromiso al decir que combatirán la corrupción “pase lo que pase, duela lo que duela, se trate de quien se trate”. Así que habrá que ver si ese combate llega hasta el exsecretario, el almirante Rafael Ojeda Durán, cuyos sobrinos, ambos mandos pertenecientes a la Marina, están acusados por encabezar una red de huachicol fiscal que manchó a la Armada de México y perjudicó en miles de millones de pesos las finanzas nacionales. Ojalá se honre esa promesa de que “se trate de quien se trate”.
Y ahora que la Marina señaló que tuvo que dar un golpe de timón para impedir que la corrupción siguiera avanzando en la institución y que la propia institución inició con esa limpia, nos hacen ver que en el Senado, el líder de la bancada, Adán Augusto López, bien podría seguir el ejemplo de la Armada y él mismo dar la cara ante las autoridades, sin esperar a ser llamado, para explicar, si es que eso es posible, cómo no se dio cuenta de que su secretario de Seguridad cuando fue gobernador de Tabasco, Hernán Bermúdez, hoy arrestado en Paraguay y en espera de ser extraditado a México, pudo encabezar simultáneamente la seguridad del estado, y la organización criminal “La Barredora”. Urge un golpe de timón en el caso de “La Barredora”.
Este martes llamó la atención el cambio de actitud del presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el ministro Hugo Aguilar hacia la presidenta de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán. El ministro, quien no aplaudió cuando la diputada panista fue mencionada en el acto del pasado 13 de septiembre, aseguró que solo fue una “pequeña distracción” y ayer, en el desfile militar, aplaudió al igual que el resto del gabinete cuando doña Kenia fue presentada. Al parecer, se ha comenzado a captar el mensaje de cordialidad enviado por la propia presidenta Claudia Sheinbaum, quien intercambió palabras con la legisladora panista. En la ceremonia de ayer se les vio charlando y riendo por momentos durante los 12 minutos que se sentaron juntas, mientras el general Ricardo Trevilla hizo uso del pódium durante el desfile.
Nos cuentan que los youtubers afines al gobierno se toparon con pared en la ceremonia del primer Grito de Independencia de la presidenta Claudia Sheinbaum. Resulta que algunos intentaron conseguir más acreditaciones de las que les correspondían, con la intención de llevar a familiares al festejo patrio en Palacio Nacional. Pero la jugada no salió como esperaban, pues en la oficina de Comunicación Social se cerró la puerta y no hubo manera de multiplicar los accesos. Eso sí, se detectó a más de un “medio fantasma” que logró colarse, y cuyo principal interés no fue precisamente cubrir el evento, sino tomarse selfies con los asistentes y presumir en redes que “estuvieron cerca del balcón”. Una cosa es que esos youtubers sean empleados de la Cuarta Transformación, y otra, que pertenezcan a ella, nos dicen.
