Las malas noticias no dejan de llegar para el exsecretario de Seguridad de Tabasco, y presunto líder del grupo criminal “La Barredora”, Hernán Bermúdez. Primero, fue detenido por las autoridades de Paraguay. Después, la agencia antidrogas de esa nación aseguró que hay indicios de que pretendía instalar una red criminal en territorio paraguayo. Y ahora, el gobierno de Estados Unidos considera a Bermúdez, alias El Comandante H, una persona de interés por su presunta participación en el tráfico de combustibles robados. Y como las malas noticias nunca llegan solas, quizá para algunos políticos mexicanos estos datos no sean nada positivos, pues los exgobernadores Adán Augusto López y Carlos Manuel Merino, que tuvieron bajo sus órdenes a Bermúdez, así como el exfiscal de Tabasco Jaime Lastra y el general Audomaro Martínez, exdirector del Centro Nacional de Inteligencia, no solo deberán convencer a la justicia mexicana de que nunca supieron de las operaciones criminales de Hernán Bermúdez, sino que, eventualmente, también podrían tener que hacerlo con la estadounidense.
Nos cuentan que en Palacio Nacional han decidido tomar distancia del senador Adán Augusto López Hernández. Versiones internas aseguran que las reuniones de los lunes que la presidenta Claudia Sheinbaum sostenía con el exsecretario de Gobernación quedarán suspendidas —al menos de manera temporal— hasta que se aclare el rumbo de las indagatorias en el caso del exsecretario de Seguridad de don Adán durante su gestión como gobernador de Tabasco, Hernán Bermúdez, quien fue detenido en Paraguay y está en espera de ser extraditado a México por cargos de delincuencia organizada. Bermúdez ha sido señalado como jefe de la organización Criminal “La Barredora”. ¿Será un distanciamiento definitivo o sólo un compás de espera mientras la justicia hace su trabajo?
Nos platican que esta mañana, la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán (PAN), sí estará presente en el desfile del 16 de septiembre en el Zócalo capitalino, que encabeza la presidenta, Claudia Sheinbaum, evento al que en los últimos años no había sido invitada la representación de la Cámara baja cuando la presidía la oposición. Pese a las solicitudes de algunos morenistas para que no se invitara a la panista a eventos oficiales, nos hacen ver que la presidenta Claudia Sheinbaum ha optado por la institucionalidad y la civilidad política. Enhorabuena.
Nos recuerdan que, tras su descanso por el fin del periodo de sesiones, que duró cuatro meses, las y los diputados regresaron a San Lázaro el día 1 de septiembre, luego, sesionaron el día 2 y después se tomaron una semana. Ahora, por las fiestas patrias se dieron otro puentecito de seis días. Mañana las y los diputados deben reanudar labores y definir las comparecencias por el paquete económico y comenzar con la aprobación de las iniciativas presidenciales. Pero por si alguno de ellos aún está cansado, no es necesario que salga de su casa, podrá hacer home office, pues la sesión de este miércoles será semipresencial, es decir, que no están obligados a ir a la Cámara.

Si al Abuelo lo requiere Estados Unidos . . . Antes en México lo invitarían a unas “prácticas de tiro reales” o alfo similar . . .