HABRÁ QUE VER cómo se acomodan las calabazas en el nuevo Poder Judicial, sobre el que hay dudas y una gran expectativa de que rápidamente funcione. El nuevo órgano de administración inició con algunos tropiezos pues no tiene la información de quiénes son los nuevos 850 jueces y magistrados; ni a dónde están asignados.
EN TANTO, en la Suprema Corte ya empezó el reparto de expedientes con criterios diferentes y unos fueron asignados directamente, otros se harán mediante sistema electrónico aleatorio y otros, de plano, fueron heredados sin mayor trámite.
LLAMA LA ATENCIÓN que a diferencia de quienes presidieron antes la Corte, el ministro Hugo Aguilar también tendrá que hacer talacha judicial para resolver él mismo (bueno, su equipo) los casos que le toquen. Y no suena mal, dado que el rezago que existe en la SCJN supera los ¡mil 400 expedientes!
PUES ANTES DE QUE el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, dejara México rumbo a Quito, ya estaba Marcelo Ebrard en Washington hablando con Howard Lutnick, el secretario de Comercio; y Jamieson Greer, jefe de la oficina de USTR, para continuar negociaciones sobre los 57 puntos que el gobierno de Donald Trump ha definido como barreras comerciales que estorban el T-MEC.
EL TITULAR de Economía ha concentrado su agenda en estas espinosas negociaciones que formalmente deben arrancar el 4 de octubre, pues es la fecha definida para iniciar el diálogo de la revisión del Tratado. La noche del miércoles Ebrard reveló que en noviembre terminarían las primeras conversaciones y que esperaba buenos resultados.
LLAMÓ LA atención que la visita a Washington también sirvió para sentarse con 43 congresistas de EU, en un intenso cabildeo del funcionario mexicano.
EBRARD VIVE más tiempo en Washington que en la CDMX, tanto que dijo que le abren la puerta antes de llegar a las oficinas del USTR al ser visitante frecuente.
NO ESTÁ NADA FÁCIL esa tarea porque Trump no quita el dedo del renglón y espera claridad en las decisiones mexicanas. El tiempo apremia.
PARA ENFRENTAR la fuerte inseguridad y violencia que se padecen en Zacatecas, el gobernador David Monreal cree que la mejor manera es utilizar ¡perros robots con rifles de asalto! Así que ahora sí habrá paz para los zacatecanos… siempre y cuando nadie descubra dónde está el botón de apagado.
