Aplastantes las expresiones de Pam Bondi y Terry Cole tras confirmarse la noticia de que El Mayo Zambada se declaró culpable en una corte de Nueva York de distintos delitos relacionados con el tráfico de drogas.
Aceptó haber delinquido durante medio siglo, hasta que Estados Unidos lo atrapó en territorio mexicano y se lo llevó para ser juzgado allá. Dijo la fiscal Bondi que El Mayo vivía como rey y ahora pasará el resto de su vida en una prisión estadunidense.
Agregó que seguirán desmantelando organizaciones criminales en todo el mundo, que ha finalizado la era de impunidad y no cesarán hasta terminar con ellos, organismos terroristas internacionales. Luego le dio las gracias a sus agentes que entregaron la vida al enfrentar y derrotar a esos criminales.
Ni una palabra de elogio al gobierno mexicano. Vino después Terry Cole, el director de la DEA, quien, al menos, habló en general de “nuestros aliados en el mundo”, antes de advertir que seguirán actuando así para acabar con los cárteles: “Seguiremos cazando a las cabezas de esas organizaciones y las traeremos a Estados Unidos para ser juzgadas”.
México tuvo, de esta manera, la respuesta que tanto pidió a Washington sobre la extracción de El Mayo en julio de 2024. La ofreció Cole. Se lo llevó la DEA. Ellos “cazaron la cabeza” de El Mayo.