MÉXICO EMPEZÓ A sufrir las duras consecuencias de negarse a colaborar con Estados Unidos para ayudar a estrangular a los cárteles de la droga donde más les duele: en el millonario flujo y blanqueo de su dinero.
La decisión de ir contra CI Banco de Jorge Rangel de Alba, Intercam de Eduardo García Lecuona y Vector de Alfonso Romo deriva de una solicitud de información de una lista de 400 empresas sospechosas.
Ovidio Guzmán López, el hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, fue quien la entregó como parte de los acuerdos con el gobierno de Donald Trump, en referencias de algunos negocios asociados al Cártel de Sinaloa.
El Tesoro, que capitanea Scott Bessent, solicitó hace unos días, vía la embajada, referencias de esas 400 empresas a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Desde el principio se notificó a México que eran empresas clientas de CI Banco, Intercam y Vector, pero ni las huestes de Antonio Martínez Dagnino ni mucho menos las de Pablo Gómez entregaron la información.
Los dos bancos y la casa de bolsa sí respondieron a la solicitud de los reguladores mexicanos, pero vaya a saber por qué estos no “subieron” la información al Tesoro, lo que hubiera permitido un golpe menos duro.
De ahí el enojo que existe en el círculo de la presidenta Claudia Sheinbaum, que si bien defiende la narrativa de la no sumisión a Estados Unidos, critica el mal manejo de las autoridades hacendarias en este caso.
El punto es que el secretario de Hacienda, Edgar Amador, tuvo la información, igual que la mandataria, y no supo operar para contener lo que ya se veía venir, a pesar de lo negado que están los banqueros mexicanos.
Y lo que vienen son más denuncias, porque en la información que sí entregaron CI Banco, Intercam y Vector se da cuenta de que esas 400 empresas tenían vasos comunicantes con otras instituciones financieras.
Otras tres, que formarían parte de las 10 que inicialmente reveló la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN) hace 12 días, serían Monex, Actinver y Value: otros dos bancos y otra casa de bolsa.
Un señalamiento a los bancos Monex, de Héctor Lagos Dondé, y Actinver, de Héctor Madero, tendrían un efecto sistémico mucho mayor que los que tienen Intercam y CI Banco, por su alta transaccionalidad.
Además, conllevaría un efecto demoledor en la comunidad empresarial por la relación, tanto accionaria, como comercial con decenas de hombres de negocios reconocidos y sus empresas.
No pocas de esas empresas relacionadas cotizan tanto en la Bolsa Mexicana de Valores,la cual es presidida por Marcos Martínez, como en la Bolsa Institucional de Valores, que tiene en su dirección a María Ariza.
El caso de Value se cuece aparte: igual que Vector, es “la casa de bolsa” de Monterrey, cuyo fundador y principal accionista, Carlos Bremer, por años fue el gran custodio de las fortunas de los regiomontanos.
Bremer, como Romo, también fue cercanísimo a Andrés Manuel López Obrador, y tras su muerte, y aquí se lo informamos en su momento, parte del negocio de Value lo tomó Gonzalo López Beltrán.
Bobby, el otro hijo de AMLO, convertido ahora, ni más ni menos, que a neobanquero.
LO DICHO: EL secretario de Hacienda no tiene los suficientes resortes políticos para llegar al Salón Oval de la Casa Blanca y defender al sector financiero de la metralla del Tesoro, que comanda Scott Bessent, que no va a parar en las denuncias a bancos y demás intermediarios por lavado de dinero al crimen organizado. Se está preparando un equipo de alto nivel integrado por el propio Edgar Amador; el secretario de Economía, Marcelo Ebrard; el secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente; el Jefe de la Unidad para América del Norte de la Cancillería, Roberto Velasco, y el embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, para tratar el tema de CI Banco, Intercam y Vector, más lo que se acumule. Esperan hacerlo, si no esta semana, la próxima, una vez que los funcionarios de Donald Trump los llamen para revisar los temas comerciales. Howard Lutnick, el secretario de Comercio, estaba de vacaciones, y su par, Bessent, en otro tema, tratando de llegar a acuerdos con Europa, Japón e India, antes de sentarse a revisar los aranceles con México. Así que para Washington no corre prisa la crisis que el FinCEN está produciendo en la banca y sector financiero mexicano.
SE DICE UN líder democrático moderno, pero Alejandro Martínez Araiza, su hermano y el actual Comité Ejecutivo Nacional, adelantaron siete meses las elecciones y pretenden gobernar seis años más al Sindicato Nacional Alimenticio y del Comercio (SNAC), para disponer de millonarias cuotas sindicales anuales, como 500 millones de pesos de los que no dan cuenta, repartirse cargos y utilizar el patrimonio de los trabajadores sin transparentarlo a la autoridad y menos a los sindicalizados. En abril, Martínez se reeligió como secretario general en un proceso que tuvo una sola planilla y un Comité a modo, que incluye a su hermano como secretario general adjunto. El SNAC tuvo un daño patrimonial por 13.6 millones de pesos por una inversión en una fundación apócrifa. También se desconoce el destino de facturas canceladas, el uso real de 6.5 millones de pesos mensuales en cuotas sindicales y el dinero producto de la venta de un edificio. Trabajadores disidentes cuestionan por qué el sindicato renta oficinas en Azcapotzalco, pero también en la lujosa Torre Omega de Polanco, toda vez que carece de activos fijos.
BIRMEX TERMINÓ DECLARANDO desierta la absurda licitación LA-12-NEF-012NEF001-N-40-2025, para distribuir medicamentos e insumos para la salud en las 32 delegaciones y 26 unidades médicas del IMSS, que dirige Zoé Robledo. Era una estupidez: algún sesudo funcionario ya estaba queriendo asignar un negocio de unos 500 millones de pesos cuando ni siquiera el laboratorio del gobierno que lleva Carlos Ulloa ha podido comprar el material que se pretendía movilizar con esa disparatada licitación en 11 regiones del país. Le decía hace exactamente una semana que Víctor Sánchez, de la empresa de logística Disur, y que en Morelos lo asocian al exgobernador, Graco Ramírez, ya daba por hecho que sería el ganón.
EL ESCALAMIENTO DE la presión que Estados Unidos está ejerciendo contra México, ahora llevado al campo financiero, hace ver la urgencia de que la Presidenta haga cambios en tres áreas sensibles que, a juzgar por los hechos, ni le dan información ni le quitan golpes que nuestros vecinos nos están dando y seguirán dando: Pablo Gómez en la Unidad de Inteligencia Financiera, Alejandro Gertz Manero en la Fiscalía General de la República y Jesús de la Fuente en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.