La presencia de Adán Augusto López en el Consejo Nacional Extraordinario de Morena generó malestar en Palacio Nacional, donde se esperaba que el evento sirviera para contener la crisis provocada por las acusaciones contra Hernán Bermúdez, exsecretario de Seguridad de Tabasco.

Según fuentes oficialistas el encuentro partidista no logró frenar el avance del escándalo y, por el contrario, exhibió tensiones internas en Morena. Entre los puntos que causaron mayor inquietud destacan la ausencia del secretario de Organización, Andy López Beltrán, y la visibilidad que se le dio al propio Adán Augusto, quien enfrenta cuestionamientos por su cercanía con Bermúdez.

“Se tuvo que haber cuidado más su presencia”, dijo una fuente del partido, al señalar que la imagen del senador en el escenario, visiblemente alicaído y acompañado del grito de “no estás solo”, dio un mensaje contrario al que el oficialismo buscaba proyectar.

En Palacio Nacional también preocupa que la figura de Adán Augusto siga ganando protagonismo en medio de tensiones diplomáticas con Estados Unidos, justo cuando se intenta preservar la cohesión interna del partido rumbo a la consolidación del gobierno de Claudia Sheinbaum.

“Fue un error subirlo al escenario”, reconocieron voces del oficialismo, quienes admitieron que la intención era que su presencia fuera más discreta. La expectativa era mostrar unidad interna y respaldar a la virtual presidenta electa, pero la atención mediática terminó centrada en el caso Tabasco.

Incluso, fuentes cercanas señalaron que la presidenta del Senado, Ana Lilia Rivera, y la senadora Olga Sánchez Cordero han manifestado inquietudes sobre el impacto que la situación de Adán Augusto podría tener en el trabajo legislativo. Por su parte, se ha mencionado que Bertha Luján y Citlalli Hernández buscan tomar distancia del senador, ante la falta de claridad sobre el rumbo del caso Bermúdez.

El discurso del presidente del Consejo Nacional de Morena, Alfonso Durazo, donde hizo un llamado a la unidad total con Claudia Sheinbaum, quedó opacado por los aplausos a Adán Augusto y la polémica en torno a su participación. La fotografía del senador con gesto sombrío, tomada durante el evento, circuló ampliamente en redes sociales.

Mientras tanto, la crisis de Tabasco continúa sin ser controlada, y en el equipo cercano a Claudia Sheinbaum existe la percepción de que el daño puede extenderse más allá del ámbito local.