La facción de Los Chapitos, liderada por Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, enfrenta un momento de extrema vulnerabilidad tras la muerte de su jefe de seguridad, “La Perris”, en medio de una creciente presión de autoridades mexicanas y estadounidenses, así como del avance de grupos rivales. La aparente alianza con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) ha sido interpretada como una maniobra de supervivencia.
En entrevista con Adela Micha para La Saga, el periodista Óscar Balderas planteó tres posibles escenarios para el futuro de Sinaloa ante el reacomodo del crimen organizado en la entidad.
El primer escenario sugiere una redistribución de la violencia hacia el norte de Sinaloa, alejándose temporalmente de la capital, Culiacán. Esta posible estrategia estaría motivada por el interés en controlar zonas de la Sierra Madre Occidental, valoradas por su aislamiento geográfico y la presencia de recursos naturales, como el agua, que comienzan a ser codiciados por grupos delictivos.
El segundo escenario contempla una ofensiva de La Mayiza, grupo afín a Ismael “El Mayo” Zambada, contra Los Chapitos. Aprovechando su debilitamiento, La Mayiza podría intentar eliminar su presencia en el estado. Aunque la alianza con el CJNG otorga cierto respaldo a los Guzmán Salazar, Balderas advierte que la negociación se realiza desde una posición de desventaja, lo que podría beneficiar más al grupo de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”.
En este contexto, la estructura de Los Chapitos se ha visto afectada por la pérdida de operadores clave y el desgaste de sus redes políticas, lo que reduce su margen de maniobra y los coloca en una postura de dependencia frente al CJNG, el cual mantiene presencia en las 32 entidades del país y en más de 40 naciones.
El tercer escenario implica el retorno del conflicto armado a zonas urbanas, especialmente a Culiacán. Esto significaría una posible reactivación de enfrentamientos en escuelas, comercios y zonas habitacionales, con consecuencias directas en el tejido social y la estabilidad económica. Balderas advierte que este tipo de reacción podría deberse a un intento desesperado de Los Chapitos por recuperar el control territorial.
Según el análisis, estos tres escenarios no son excluyentes y podrían ocurrir de forma simultánea o en distintas fases del conflicto, dependiendo de cómo se reconfiguren los intereses y capacidades de los grupos criminales en Sinaloa.
Durante la entrevista, Balderas también señaló que esta coyuntura representa una ventana de oportunidad para el Estado mexicano, particularmente para actores como Omar García Harfuch, de golpear de forma decisiva a la estructura de Los Chapitos.