Griselda López Pérez, madre de Ovidio Guzmán y exesposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán, habría salido de México en un operativo silencioso y de alto riesgo el pasado viernes, cruzando a pie el puente internacional de San Ysidro, en Tijuana, acompañada de 16 familiares directos. De acuerdo con el periodista Luis Chaparro, fueron recibidos por agentes del FBI.
La familia habría llegado desde Culiacán, Sinaloa, en avión y posteriormente se trasladó en vehículos hasta el cruce fronterizo. La operación fue vigilada por fuerzas de seguridad estadounidenses, incluyendo la presencia de un francotirador posicionado en un edificio cercano, ante el riesgo de un posible atentado.
Entre los miembros del grupo estaban su hija Griselda Guadalupe Guzmán López, un nieto de nombre Archivaldo, así como yernos, primos y sobrinos, todos presuntamente cargando equipaje de marcas de lujo como Louis Vuitton, Dior y Chanel, además de más de 70 mil dólares en efectivo.
Según Chaparro, se trataría de un traslado definitivo, y no de una visita temporal, en el contexto de la inminente cooperación judicial de Ovidio Guzmán con las autoridades estadounidenses, quienes esperan que se declare culpable el 6 de junio, como parte de un acuerdo que podría incluir la reubicación y protección de sus familiares bajo nuevas identidades.
Griselda López, nacida el 19 de agosto de 1959, también es conocida como Karla Pérez Rojo, y fue la segunda esposa del Chapo. Tuvieron cuatro hijos: Joaquín, Édgar, Ovidio y Griselda Guadalupe. Su relación comenzó a finales de los años 80, durante la consolidación del Cártel de Sinaloa.
En mayo de 2010, fue detenida en Culiacán durante un operativo federal, pero fue liberada en menos de 24 horas tras rendir declaración por montos irregulares en sus cuentas bancarias. Desde entonces, ha sido señalada por autoridades estadounidenses como pieza clave en la administración financiera del grupo criminal.
En septiembre de 2012, el Departamento del Tesoro de EU la incluyó en su lista de narcotraficantes extranjeros, al considerarla colaboradora del Cártel de Sinaloa. En entrevistas con medios como Noroeste y Ríodoce, ha negado vínculos de sus hijos con el narcotráfico y acusado persecución por parte de ambos gobiernos.
Ovidio Guzmán, apodado “El Ratón”, era considerado el hijo más consentido por Griselda y por su padre, de acuerdo con testimonios recogidos por la periodista Anabel Hernández. Tras su captura en enero de 2023, su madre habría cubierto los gastos funerarios de los sicarios caídos durante los enfrentamientos en Jesús María, Sinaloa.
Vecinos de esa región también han reconocido su influencia local. En entrevista con Milenio, una familiar de Ovidio expresó su molestia por la captura, asegurando que la ayuda de la familia Guzmán fue más efectiva que la del gobierno.
Actualmente, no existen registros oficiales en México que la vinculen directamente con actividades delictivas. Sin embargo, su inclusión en las listas de la OFAC y el reciente operativo en la frontera refuerzan la percepción del gobierno estadounidense sobre su papel en la estructura de Los Chapitos.