Medios afines a Morena inflan protesta contra Calderón en España y omiten sus críticas al autoritarismo en América Latina

Mientras exageran manifestación de unas decenas, ocultan que Calderón y otros expresidentes advirtieron sobre regímenes que destruyen la democracia desde dentro

Internacional

Una protesta a las afueras del Teatro Campoamor en Oviedo, España, contra el expresidente Felipe Calderón fue amplificada por medios alineados al régimen de Morena, quienes replicaron de manera coordinada la noticia bajo la misma primicia: “Lanzan gritos de repudio a Calderón en España”.

Según estos medios, financiados con recursos públicos y alineados con la oficina de Jesús Ramírez Cuevas, actual Coordinador de Asesores de la Presidencia, unas 200 personas se habrían manifestado, aunque las imágenes difundidas muestran únicamente un par de decenas de asistentes.

La campaña incluyó a periódicos como La Jornada y El Imparcial, portales como Infobae, cuentas de Twitter automatizadas, legisladores, propagandistas en YouTube y medios beneficiados con publicidad oficial, muchos de ellos ligados directamente al obradorismo. El medio argentino Infobae incluso calificó al evento como de “ultraderecha”, aunque los asistentes —expresidentes de Argentina, Colombia, España y México— poco tienen que ver con esa corriente ideológica.

En contraste con la atención mediática a la protesta, la cobertura omitió casi por completo el contenido del foro “La política y el desarrollo: dos caras de la misma moneda”, parte del VI Encuentro Ciudadano organizado por la Fundación Libertad y Desarrollo.

¿Qué se dijo en el encuentro?

En el interior del Teatro Campoamor se celebraba el VI Encuentro Ciudadano organizado por la Fundación Libertad y Desarrollo, donde expresidentes y expertos alertaron sobre el avance del autoritarismo populista en América Latina, fenómeno que —aunque no lo dijeron con nombre y apellido— describe con precisión el modelo de gobierno implantado en México por la administración obradorista.

Asistentes al interior del Teatro Campoamor

Dionisio Gutiérrez, presidente de la Fundación, advirtió que “vivimos una época que amenaza con disolver las formas políticas que con sangre y fuego construyeron el mundo libre en el siglo XX”. Señaló el retorno del populismo y el autoritarismo como amenaza central para la región.

José María Aznar, expresidente de España, criticó las alianzas de Pedro Sánchez en España y urgió a emprender nuevas políticas con líderes diferentes, mientras que Andrés Pastrana fue tajante al advertir que “estamos frente a líderes autoritarios que, con falsas ilusiones, lesionan las instituciones democráticas”.

Participantes del primer panel “VI Encuentro Ciudadano, La política y el desarrollo: dos caras de la misma moneda”.

Felipe Calderón lamentó la desorganización de quienes defienden la democracia frente al avance del autoritarismo: “No tenemos las soluciones dialogadas. No tenemos una estrategia definida”, sostuvo. También advirtió sobre el auge de gobiernos autoritarios elegidos democráticamente: “Tanto Hitler como Mussolini y los autoritarios latinoamericanos llegaron por el voto y no piensan salir de ahí”, afirmó. Señaló al Grupo de Puebla y al populismo como mecanismos de control bajo apariencia democrática.

En otro panel, Álvaro Vargas Llosa describió la manipulación emocional como una herramienta poderosa del populismo y criticó el lento desmantelamiento constitucional en Estados Unidos como espejo de lo que ocurre en América Latina. Eduardo Fernández Luiña advirtió que “el autoritarismo populista ha triunfado en parte por las narrativas” y que su llegada al poder es un síntoma claro del fracaso democrático.

Lorent Saleh, activista venezolano, sostuvo que la impunidad es la base del autoritarismo, y criticó duramente la traición de las élites, señalando que “las ideas de libertad, aunque parezcan minoría, son las más justas”.

Pese a la relevancia del foro, los medios alineados al régimen mexicano prefirieron centrarse únicamente en los gritos lanzados a Calderón a su llegada, invisibilizando las críticas a regímenes que, como el mexicano, concentran poder con respaldo popular y lo utilizan para debilitar las instituciones democráticas.