LOS FUNCIONARIOS Y legisladores de la CDMX, por increíble que parezca, parece que están haciendo esfuerzos para que nuestra ciudad capital deje de ser sede mundialista el año entrante. Primero, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, y los 16 alcaldes, presentaron una serie de acciones usando la palabra “Mundial” y “Mundialito”, que sólo tiene registradas a su nombre FIFA.
También presentaron una mascota, un ajolote, que no es la que FIFA tiene programada para las ciudades sede en América del Norte. Luego, los diputados locales, Fernando Zárate de Morena y Jesús Sesma del Partido Verde, han presentando en los últimos días iniciativas que prohíben a los patrocinadores de FIFA anunciarse en eventos deportivos. Todo lo anterior en violación de los acuerdos firmados entre el gobierno federal y el de la CDMX con la federación que capitanea Gianni Infantino.
De todo esto ya hay reporte en la sede de FIFA, en Suiza. A todo lo anterior hay que agregar el tema de la inseguridad, que luego de los homicidios de alto impacto de la semana pasada de los cercanísimos colaboradores de Brugada, le dio la vuelta al mundo. “Creo haber escuchado anoche que otras dos personas fueron asesinadas en la CDMX, vinculadas con la alcaldesa de la ciudad. La violencia política allí es real”, dijo el martes pasado el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio.
El presidente Donald Trump ha dicho en varias ocasiones que el mundial 2026 es “suyo”, dado que él lo cabildeó con FIFA, de la mano de Bob Kraft, dueño de Los Patriotas de Nueva Inglaterra, y de Emilio Azcárraga, dueño y presidente del Club América. Seguramente a Trump nada le daría más gusto que poder inaugurar el Mundial 2026 en Estados Unidos, dado que parece imposible que visite el Estadio Azteca el 11 de junio de 2026, que arranca la justa futbolera.
Pero con tantos errores legales, el gobierno y legisladores capitalinos están poniendo en riesgo que la Copa del Mundo se realice en la CDMX; no es que FIFA o Trump nos lo “quiten”. Sencillamente la CDMX y sus diputados están violando los protocolos que FIFA firmó con todas las sedes mundialistas y de no corregirse aplicaría la cláusula de incumplimiento (default), más las penas convencionales por los trabajos que ha hecho FIFA y patrocinadores, mismos que se ponen en riesgo.
Al tiempo que este asunto es delicado y parece estar fuera de control, ¿será momento de que Gabriela Cuevas empiece también a revisar temas de los gobiernos de la CDMX, Monterrey y Guadalajara, de cara al Mundial de 2026?
ESTA SEMANA ES la última previa a las elecciones de nuevos jueces, magistrados y ministros, el próximo domingo 1 de junio. Van arreciar las campañas electorales y los golpes bajos. Los nombres que se impulsan desde Palacio Nacional para ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación son Lenia Batres, Yasmín Esquivel, Loretta Ortiz, Sara Irene Herrerías, María Estela Ríos, Hugo Aguilar, Irving Espinosa, Giovanni Figueroa y Arístides Guerrero. Para encabezar el nuevo Tribunal de Disciplina Judicial, son Verónica de Gyves, Celia Maya, Indira Isabel García, Bernardo Bátiz y Rufino H. León.
Para los dos puestos del Tribunal Electoral Claudia Valle y Gilberto de Guzmán Bátiz. El gobierno de la 4T y Morena han desplegado una estrategia de trabajo territorial con sus mejores operadores electorales, los cuales echarán mano de todo tipo de artimañas. Por ejemplo, a los sindicatos ha llegado desde la semana pasada una instrucción para dirigir el voto, que consiste en mandar a sus bases un código que simula un número telefónico, pero que en realidad son los números de la boleta que deben marcar para seleccionar jueces, magistrados y ministros a modo. ¡Viva la democracia de la 4T!
AQUÍ LE HEMOS insistido en la preocupación y ocupación de los distintos jugadores del sector financiero mexicano, tras de que el gobierno de Donald Trump declaró a seis cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas.Hablamos del Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel Sinaloa, el Cártel del Golfo, La Nueva Familia Michoacana, el Cártel del Noroeste y Cárteles Unidos. Todos han infiltrado las actividades económicas cotidianas en distintas regiones del país.
Uno de los rubros que controlan en varias regiones del país es el comercio minorista y concretamente las tiendas de conveniencia. Cadenas como Oxxo, que comanda José Antonio Fernández Carbajal; 7-Eleven, de Luis Chapa, y Círculo K, de Carlos Kalach, están en sus manos, lo que pone a sus dueños en una posición vulnerable frente a las nuevas directrices de los Departamentos de Estado, que encabeza Marco Rubio, y del Tesoro, que lleva Scott Bessent, respecto del lavado de dinero y financiación a grupos terroristas. Por cierto, Rubio estará en México esta semana.