La empresa estadounidense Colossal Biosciences anunció este lunes el nacimiento de tres lobos gigantes, especie extinta hace más de 12 mil años, en lo que representa un hito biotecnológico sin precedentes. La firma, valorada en 10 mil millones de dólares, informó que los ejemplares nacieron gracias a técnicas avanzadas de edición genética, a partir de células de lobos grises modificadas con rasgos del lobo gigante.
Los cachorros, llamados “Remus”, “Romulus” y “Khaleesi”, viven en una reserva natural cercada en una ubicación no revelada, y pesan actualmente alrededor de 36 kilos, con proyecciones de alcanzar los 63 kilos en la edad adulta, entre un 20 y 25% más grandes que el lobo gris, su pariente más cercano.
Colossal ganó notoriedad en 2022 al anunciar su intención de revivir al mamut lanudo, aunque hasta ahora sólo ha logrado crear un “ratón lanudo”. En esta ocasión, el proyecto implicó la recuperación de ADN antiguo obtenido de un cráneo de 72 mil años en Idaho y un diente de 13 mil años en Ohio, explicó la científica principal del proyecto, Beth Shapiro, profesora en la Universidad de California en Santa Cruz.
El proceso incluyó 20 ediciones genéticas a células de lobo gris, enfocadas en tamaño, musculatura y pelaje, que luego fueron implantadas en óvulos de perros domésticos. Las crías nacieron por cesárea, con madres sustitutas de razas grandes.
La compañía también logró clonar dos camadas de lobos rojos, especie actualmente en peligro de extinción. Los cuatro cachorros recibieron los nombres Hope, Blaze, Cinder y Ash.
Colossal ha recaudado 435 millones de dólares de inversionistas como Peter Jackson, Paris Hilton y Tony Robbins, y ha generado dos empresas derivadas enfocadas en biodegradación de plásticos y software computacional. En enero, la compañía fue valuada en 10.2 mil millones de dólares, con el respaldo de TWG Global, de Mark Walter, y el financiero Thomas Tull.
Pese a los avances, el proyecto ha generado escepticismo entre paleogenetistas y cuestionamientos éticos, sin afectar el interés de los inversionistas. El concepto de “desextinción”, definido como la creación de organismos genéticamente similares a especies extintas, sigue siendo el eje de la estrategia científica y financiera de Colossal.
El objetivo final de la empresa, según su CEO Ben Lamm, es construir tecnologías que también tengan aplicaciones en salud humana y conservación, lo que, afirma, representa un mercado potencial multimillonario.