“DESDE LA SEMANA pasada autoricé una compra emergente, que se va hacer a través de la subasta inversa, y ya se están adquiriendo (los medicamentos) para poderlos enviar”.
Así se refirió la semana pasada la presidenta Claudia Sheinbaum cuando la cuestionaron en la Conferencia Mañanera sobre el desabasto de medicinas oncológicas para pacientes con cáncer.
Y sí, efectivamente, lo que no se pudo hacer bien en seis años del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, e incluso en la primera compra consolidada de la doctora, se consiguió en menos de una semana.
Fue tal la presión al subsecretario de Salud, Eduardo Clark, corresponsable de los fracasos en los primeros cien días de gobierno, que se aplicó para sacar rápido y bien esta compra emergente.
Se compraron 21 claves con un ahorro de saque de 292 millones de pesos implementando la subasta inversa, un mecanismo muy eficiente y transparente que no se sabe por qué no se utilizó desde el principio.
Ni la entonces Oficial Mayor de Hacienda, Raquel Buenrostro; ni la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), a cargo del brasileño Jorge Moreira, pudieron con el paquete.
Peor aún con el fallido Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) de los funestos tabasqueños Juan Ferrer y Alejandro Calderón Alipi, y no se diga Birmex, con el general Jens Lohmann y con Iván Olmos.
Sólo en tres claves de lenalidomida para tratar el mieloma múltiple y el linfoma folicular, las huestes de David Kershenobich obtuvieron la semana pasada un ahorro bianual de mil 500 millones de pesos.
El principal perdedor de esta primera compra urgente de oncológicos fue la estadounidense Bristol Myers, que preside Chris Boerner, que vendía la caja en la compra consolidada bianual en 38 mil pesos.
En esta referida subasta inversa el mismo medicamento la farmacéutica mexicana, Ultra Laboratorios, que lidera José Luis Rubio Santiago, lo remató en 11 mil pesos.
Productos que fueron fincados, apunte el trastuzumab para cáncer de mama; el bortezomib para cáncer de médula ósea; el gemcitabina, agente quimioterápico para tratar cáncer de pulmón, páncreas y de vejiga.
Asimismo, doxorrubicina para ralentizar el crecimiento de células cancerosas; el ondansetrón para prevenir náuseas y vómitos producidos por las quimioterapias, entre varios más.
Los productos están para entregarse inmediatamente y en las próximas dos y cuatro semanas.
Los laboratorios fincados fueron Zurich Pharma de Orlando Silva, Lemery de Mauro Lara, Pfizer que preside Juan Luis Morell, Probiomed de Jaime Uribe Wiechers y Ultra del mencionado Rubio Santiago.
HACE UNOS DIEZ meses le conté que Valle de Bravo tenía un nuevo vecino. Un vecino incómodo que desembarcó en 2023 irrumpiendo en las comunidades locales y agotando el agua. Se trataba de Germán Larrea, que tuvo la grandiosa idea de cerrar pasos que comunican a los pueblos de esa zona. El dueño del Grupo México edifica un rancho para sus caballos pura sangre, en una propiedad que supera las mil hectáreas en la entidad que gobierna Delfina Gómez. Pues bien, la noticia es que la semana pasada le cayó un operativo de la Fiscalía General de la República, que comanda Alejandro Gertz Manero, y la Fiscalía mexiquense, que encabeza José Luis Cervantes, por presuntos delitos contra el medio ambiente. El cateo se efectuó en una zona protegida y fue por orden de un Juez con residencia en Almoloya de Juárez. La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, que lleva Mariana Boy, detectó diez presas captadoras de agua que eran utilizadas para el uso ilícito del recurso hídrico. El rancho tiene varios lagos artificiales. También se decomisaron 27 vehículos que estaban dentro de la propiedad.
EL GOBIERNO DE Donald Trump, vía la Oficina de Representación Comercial, que capitanea Jamieson Greer, está haciendo un seguimiento detallado de las empresas mexicanas productoras de acero y comercializadoras del mismo producto. Están convencidos que exportaron, e incluso siguen exportando, acero de origen chino a Estados Unidos, lo que llevó a aplicar a nuestro país el arancel de 25%. Un caso que llama la atención es el de Grupo Collado, de Guillermo Vogel, que incluso se ha deslindado de sitios web que, dice, están siendo utilizados para ofrecer servicios, productos e información apócrifa a su nombre. Vogel es socio de Tubos y Aceros de México, mejor conocido como TAMSA, además que pertenece al directorio de Tenaris y representa a los empresarios del país en el US-México CEO Dialogue.
LE PLATIQUÉ HACE unos días del caso de Proyecta Industrial, la empresa que tuvo una participación destacada en la construcción de la refinería de Dos Bocas. Su fundador, Daniel Flores, murió hace casi dos años en un trágico accidente aéreo. La compañía ya está prácticamente cerrada, pero continúa litigando cuentas por pagar. De hecho, tiene demandado a Pemex porque la administración de Octavio Romero Oropeza aún le debe 2 mil millones de pesos por trabajos ejecutados. Proyecta, que quedó bajo la administración de Adriana Camacho, socia de Flores Nava, también está demandada por subcontratistas de esa obra faraónica del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. De 64 acreedores que llegó a tener ha podido pagar a la mitad.
FUNDADA EN MEXICALI, Baja California, la empresa Servicios Integrados en Sistemas de Enfriamiento se convirtió en lo que va del año en uno de los proveedores consentidos de la Comisión Federal de Electricidad, que dirige Emilia Calleja. Entre marzo y abril de este año, la firma de los hermanos Temoc y Mayey Reyes Sayavedra superó en sendos concursos licitatorios a compañías en otros tiempos favoritas, como Grupo Daypro que dirige José Antonio Meneses o Química Apollo que dirige Constantine Galanis. En específico, en sólo dos semanas obtuvo más de 110 millones de pesos para brindar el servicio de reemplazo y limpieza de las centrales termoeléctricas en Nuevo León y la CDMX, todos solicitados para CFE Generación IV.