El Gobierno de Jalisco, encabezado por Pablo Lemus, enfrenta presiones desde Palacio Nacional para fortalecer su coordinación en materia de seguridad con la administración federal y con el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch.
De acuerdo con fuentes en Palacio, el Gabinete de Seguridad busca evitar una posible desestabilización en Jalisco, similar a la que se vive en Sinaloa tras el presunto secuestro de Ismael “El Mayo” Zambada en junio de 2024, lo que desató enfrentamientos entre Los Chapitos y La Mayiza.
La advertencia quedó reflejada en un video en el que sujetos fuertemente armados, presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), amenazaron a las madres buscadoras por el caso del Rancho Izaguirre, en Teuchitlán. En la grabación se escucha: “¿Qué quieren, otro Sinaloa, donde se rompió la paz social? ¿Secuestros, homicidios, y tener que emigrar a otro estado o a otro país?”
El temor de que la violencia escale en Jalisco se intensificó con reportes sobre una posible alianza entre Iván Archivaldo Guzmán, líder de La Chapiza, y Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, del CJNG, dos grupos que han mantenido una violenta disputa durante la última década.
En este contexto, empresarios e inversionistas han expresado su preocupación ante la posibilidad de que Guadalajara y municipios aledaños sufran un incremento en la violencia, similar a lo que ocurre en Mazatlán y Culiacán desde el último trimestre de 2024.
Gertz Manero evalúa reunión en Jalisco por caso Teuchitlán
La presión sobre Pablo Lemus también se reflejaría en una reunión que sostendrán el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, y el fiscal de Jalisco, Salvador González de los Santos. El tema central será la coordinación de las corporaciones estatales y municipales con la Guardia Nacional y la policía bajo el mando de García Harfuch.
Gertz ha sido crítico con la gestión del exfiscal Luis Joaquín Méndez, a quien señaló por presuntas obstrucciones en la investigación del caso Teuchitlán. Su visita a Jalisco aún no está confirmada debido a preocupaciones de seguridad y el riesgo de que el caso adquiera dimensiones políticas que afecten a la Cuarta Transformación, en un escenario similar al de Ayotzinapa.