Washington.- Las amenazas arancelarias del presidente Donald Trump se han convertido en una realidad devastadora para la iniciativa privada estadounidense, con impactos que van desde aumentos de precios hasta la posibilidad de recesión en sectores clave como el automotriz, el agrícola y el comercio minorista.
Efectos inmediatos en las empresas
El lunes por la noche, cuando se anunció la imposición de aranceles del 25% a las importaciones de México y Canadá y del 10% a productos chinos, las empresas estadounidenses entraron en pánico. Target, una de las cadenas minoristas más grandes del país, comenzó a replantear sus planes, ya que los aranceles encarecerán frutas, electrónicos y otros productos de importación.
“Si se mantienen estos aumentos de precios, el impacto en el consumidor será inmediato”, advirtió Brian Cornell, CEO de Target.
El sector automotriz es otro de los más golpeados. Se estima que los aranceles podrían aumentar hasta en 10,000 dólares el costo de algunos modelos de camionetas fabricadas con partes provenientes de México y Canadá. Ford y General Motors registraron caídas en sus acciones, mientras que proveedores como RoMan Manufacturing temen perder clientes en Canadá ante la posibilidad de que busquen alternativas en Europa o Japón para evitar pagar los impuestos adicionales.
Industria y agricultura en alerta
Hasbro, fabricante de juguetes como Nerf y Monopoly, enfrenta el dilema de subir precios o absorber los costos, ya que 40% de sus productos provienen de China. Por su parte, Best Buy alertó que sus principales proveedores de electrónicos son México y China, lo que haría inevitables los aumentos de precios para los consumidores estadounidenses.
En el sector agrícola, productores de soya, pollo y carne de cerdo están en crisis ante las represalias arancelarias de China, México y Canadá. “Esperamos que Trump reparta miles de millones de dólares en ayuda, como hizo en su primer mandato”, comentó Barry Evans, un agricultor de Texas.
Los constructores de vivienda también ven una subida en los costos de construcción de hasta 1,700 millones de dólares anuales, debido a que más del 70% de la madera y yeso usados en EE.UU. provienen de México y Canadá.
Impacto en la economía y reacción de los mercados
El mercado bursátil estadounidense se desplomó tras la noticia. Empresas como Boeing, uno de los principales exportadores del país, también registraron caídas en sus acciones ante el temor de más represalias comerciales.
Para algunos analistas, esta crisis es un intento de Trump por presionar a México y Canadá para que tomen medidas más agresivas contra el tráfico de fentanilo y la migración ilegal. Sin embargo, la incertidumbre económica sigue creciendo, y muchas empresas advierten que, si los aranceles se mantienen, el impacto en la economía estadounidense será catastrófico.
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