El desplome en Wall Street registrado este lunes, con las acciones tecnológicas protagonizando su peor caída desde 2022, ha generado preocupación en Estados Unidos y a nivel global. Sin embargo, en el Gobierno mexicano, esta situación es vista como una señal de que las políticas comerciales de Donald Trump están generando más daño del esperado, según reveló el secretario de Economía, Marcelo Ebrard.

De acuerdo con fuentes cercanas a la dependencia, Ebrard considera que la estrategia arancelaria de la Casa Blanca ha resultado contraproducente, pues en lugar de fortalecer la recaudación y el comercio interno, ha desatado un clima de incertidumbre que ha golpeado a los mercados y a la inversión.

Los riesgos de una guerra arancelaria

En la Secretaría de Economía, advierten que la política de “aranceles recíprocos” promovida por Trump es inviable sin propiciar un escenario de estanflación (inflación con estancamiento económico), algo que ya empieza a reflejarse en los datos de empleo en EE.UU., que fueron peores de lo esperado por los analistas.

Además, destacan que este tipo de medidas ya se han intentado en diferentes momentos del siglo XX sin éxito, provocando efectos negativos en los mercados y afectando directamente el consumo y los patrimonios de los ciudadanos.

“Esta es la verdadera incertidumbre, la que lleva a la parálisis. Esto es mucho peor que la reforma judicial de López Obrador”, señalaron fuentes cercanas a Ebrard.

México gana terreno con control migratorio y lucha contra el narcotráfico

Ebrard también considera que, ante la crisis económica que enfrenta Trump, México tiene una ventaja estratégica gracias a los avances en control migratorio y combate al narcotráfico.

El secretario de Economía cree que estos dos temas son clave para la administración republicana y representan de los pocos frentes en los que Trump podría mostrar algún tipo de resultado positivo, lo que daría a México mayor margen de maniobra en la negociación comercial.

Mientras tanto, el Gobierno mexicano sigue a la expectativa de cómo evolucionará la situación económica en EE.UU. y qué impacto tendrá en la relación bilateral.