AUNQUE falta la aprobación del Senado, la llegada a Hacienda de Edgar Amador, viejo conocido de Claudia Sheinbaum, marcará un cambio de escuela… y de estilo.
ECONOMISTA por la UNAM, forma parte del grupo de discípulos del fallecido Carlos Urzúa junto con Arturo Herrera y Gabriel Yorio, con la diferencia de que Amador acumuló mayor experiencia política, lo que lo hace un hábil negociador siendo ya muy conocido por gobernadores, rectores y funcionarios.
PARA NADIE es secreto que Rogelio Ramírez de la O -quien llevaba meses tocando el botón para bajarse del autobús por temas personales- es de una escuela económica más ortodoxa que la de Amador, por lo que se anticipan modificaciones en la manera de conducir la SHCP. Eso sí, el hoy asesor presidencial ofreció ayudar en negociaciones con bancos internacionales ahora que esté residiendo en el extranjero.
A VER, A VER… ¿y por qué de repente brincaron los maestros sindicalizados que llevaban años de la mano de la 4T?
EN LA burocracia magisterial se dice que los dirigentes del SNTE andan inquietos por el cambio de dirigencia de este año, sobre todo porque quienes aún le son fieles a Elba Esther Gordillo no quieren que el actual dirigente, Alfonso Cepeda, deje a un sucesor a modo.
Y CON eso de que la CNTE nomás oye la palabra pancarta y ya está armando marchas y plantones, la situación se aceleró y se complicó.
DE HECHO, para movilizar a los maestros les han dicho que la nueva Ley del ISSSTE incrementará el monto de sus aportaciones, cosa que es falsa.
PERO los líderes quieren sacar raja política sin importarles que los niños se queden sin clases.
AUNQUE sí habrá bailongo, no todo será pachanga en el ClaudiaFest de mañana en el Zócalo; también se dará un discurso.
QUIENES han visto las cuartillas que se están redactando aseguran que Claudia Sheinbaum aprovechará para hablar de la reforma judicial y la importancia de votar en junio.
DE LOS aranceles hablará poco y no se revelará cuáles eran los planes A, B, C y D, pues, en una de esas, a principios de abril se vuelven a necesitar y ni modo de gastar pólvora en festivalitos, ejem… en infiernitos.