Elon Musk sigue expandiendo su influencia en Washington. Según The New York Times, Tesla podría recibir un contrato del Departamento de Estado de EE.UU. por 400 millones de dólares para proveer Cybertrucks al gobierno estadounidense. Este acuerdo refuerza la estrecha relación entre Musk y Donald Trump, quien ha favorecido a la compañía con contratos gubernamentales por 13 mil millones de dólares en los últimos cinco años.
La noticia es vista como un respiro para Nuevo León, donde la planeada gigafábrica de Tesla en Santa Catarina sigue sin avances concretos y ha generado tensiones políticas en la entidad. El gobernador Samuel García apuesta a que este contrato impulse la inversión y destrabe el megaproyecto, dado que la planta estaría enfocada en la producción de Cybertrucks, justo el modelo que Musk vendería al gobierno estadounidense.
Sin embargo, el dueño de Tesla mantiene cautela en el conflicto comercial entre Trump y la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum. Musk sabe que los aranceles podrían afectar seriamente la operación de Tesla en México, por lo que ha optado por un perfil bajo en este tema mientras mantiene su cercanía con Trump.
En paralelo, el empresario busca que Estados Unidos apruebe su patente para autos sin conductor, lo que convertiría a Tesla más en una empresa de tecnología que en una simple automotriz. Según fuentes en el gobierno de Nuevo León, esta es la razón clave por la que Musk ha fortalecido su relación con Trump, ya que la validación de esta tecnología aseguraría el futuro de Tesla en el mercado global.
No obstante, la influencia de Musk en la nueva administración no es bien vista por todos. Encuestas recientes de YouGov indican que solo entre el 11% y el 13% de los estadounidenses quieren que Musk tenga “mucha” influencia en el gobierno de Trump, una caída significativa respecto al 27% que opinaba lo mismo en noviembre.
Mientras tanto, los funcionarios de Nuevo León mantienen comunicación constante con Tesla, con la esperanza de que la alianza entre Musk y Trump se traduzca en la reactivación del proyecto en Santa Catarina.