La presencia de una narcomanta en una preparatoria de Hermosillo ha encendido las alarmas en Sonora. El mensaje, firmado por el Nuevo Cártel de Juárez (NCDJ), apareció en la reja del Cecytes de la colonia El Mariachi, donde el grupo criminal anunció su llegada a la entidad y advirtió sobre una “limpia” contra sicarios, distribuidores de droga y autoridades que los protejan.
“No habrá perdón para nadie”, se leía en la manta, marcando el retorno de un grupo que no se había manifestado en la región en los últimos años.
Autoridades investigan la posible expansión del NCDJ
El comisionado de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), Carlos Alberto Flores, reconoció que la firma de la narcomanta no coincide con otras que han aparecido recientemente en Sonora. Sin embargo, confirmó que el grupo mantiene una fuerte disputa en la frontera entre Sonora y Chihuahua, lo que abre la posibilidad de que busque extender su presencia hacia el centro del estado.
El funcionario explicó que el control de rutas para el trasiego de drogas y migrantes es el principal motivo de los enfrentamientos entre los diferentes cárteles que operan en la región.
A finales de enero, otro mensaje similar apareció en una escuela de Hermosillo, pero en aquella ocasión la amenaza iba dirigida al cantante Natanael Cano. En ese caso, la firma correspondía a “Los Jalisco Mata Salas”, una célula ligada a Los Chapitos, que junto con Los Deltas y Los Pelones, mantienen la pugna por el territorio sonorense.
Escalada de violencia en Sonora
El escenario criminal en Sonora es complejo. Además del Nuevo Cártel de Juárez, operan grupos como Los Rusos, brazo armado de La Mayiza con fuerte presencia en San Luis Río Colorado, y el Cártel de Caborca.
La violencia generada por estas disputas ha dejado un saldo preocupante. Solo el lunes pasado, siete personas fueron asesinadas en San Luis Río Colorado, mientras que en los primeros días de febrero la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) ha contabilizado 15 homicidios dolosos en la entidad.
Las autoridades han reforzado la vigilancia en la zona, pero la presencia de nuevas células criminales sugiere que la lucha por el control del estado podría intensificarse en las próximas semanas.