El papa Francisco fue hospitalizado este viernes en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma para someterse a pruebas diagnósticas y recibir tratamiento por la bronquitis que padece, informó el Vaticano.

El pontífice, de 87 años, había mantenido una agenda activa durante la mañana, pero experimentó dificultades para hablar durante largos periodos, según reportó CNN, cuyo director ejecutivo, Mark Thompson, se reunió con él antes de su traslado al hospital.

Problemas respiratorios y antecedentes médicos

Francisco, quien ha sido propenso a infecciones pulmonares, ya había mencionado a principios de mes que padecía un fuerte resfriado, que luego fue diagnosticado como bronquitis. Su historial médico incluye la extirpación de parte de un pulmón en su juventud debido a pleuresía, lo que lo ha hecho más vulnerable a problemas respiratorios.

A pesar de sus problemas de salud, el papa ha mantenido un ritmo de trabajo intenso. Este viernes también se reunió con el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, el cardenal Luis Tagle y un grupo filantrópico católico de Puerto Rico.

Francisco y sus recientes problemas de salud

En los últimos meses, el papa ha sufrido dos caídas en su residencia vaticana: una en diciembre, en la que se golpeó la barbilla, y otra en enero, que le provocó una lesión en el brazo.

A pesar de estos incidentes y su movilidad reducida, Francisco ha seguido con viajes internacionales exigentes, como su gira de 12 días por el sudeste asiático y Oceanía en septiembre de 2023, la más larga de su pontificado.

El hospital Gemelli, el más grande de Roma, cuenta con una suite especial para el tratamiento de los papas, donde Francisco ya pasó nueve días en junio de 2023 tras ser operado de una hernia abdominal.

Hasta el momento, el Vaticano no ha dado detalles sobre el tiempo que permanecerá hospitalizado ni si su agenda sufrirá modificaciones.