Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Fiscalía General de la República (FGR) y el área de Seguridad Física de Petróleos Mexicanos (Pemex) ejecutaron una orden técnica de investigación que llevó al decomiso de 9 mil litros de hidrocarburo robado en el sur de Sonora, además del aseguramiento de un lanzallamas y cinco vehículos presuntamente utilizados en el traslado del combustible.
El Gabinete de Seguridad del Gobierno de México informó que, durante el operativo del jueves 6 de febrero, también se aseguraron 10 contenedores de mil litros vacíos, que habrían sido utilizados para el almacenamiento del huachicol. Todo lo incautado fue puesto a disposición del Ministerio Público Federal, que continuará con las investigaciones.
Nuevas medidas para combatir el huachicol
La presidenta Claudia Sheinbaum anunció este viernes una nueva estrategia para frenar el robo de combustible en México, que incluirá un sistema de monitoreo más riguroso a cargo de la Secretaría de Energía (Sener).
Desde Palacio Nacional, la mandataria explicó que la iniciativa busca mejorar el control en la distribución de combustibles desde su origen hasta su venta, a través de una supervisión más estricta en cada etapa del proceso.
“La trazabilidad será clave para asegurar que el combustible no sea desviado ni comercializado de manera ilícita”, afirmó Sheinbaum.
El nuevo esquema implica un cambio significativo en la vigilancia del combustible, que actualmente se encuentra fragmentada entre diversas dependencias, lo que dificulta su supervisión integral.
Resultados en la lucha contra el robo de combustibles
De acuerdo con Sheinbaum, las acciones implementadas desde el gobierno anterior han logrado reducir considerablemente el robo de gasolina en comparación con sexenios previos.
“Este delito ha bajado considerablemente gracias a las estrategias implementadas por parte del presidente López Obrador”, destacó la presidenta.
Además, subrayó que el uso de tecnología avanzada será clave en la vigilancia de ductos y estaciones de servicio, con el objetivo de erradicar los robos y desvíos de combustible que afectan tanto a la economía como a la seguridad del país.
Las nuevas medidas incluyen una mayor coordinación entre autoridades federales y locales, así como un reforzamiento en la protección de los ductos de Pemex, con el propósito de cerrar espacios a las redes del huachicol en el país.