Donald Trump ha planteado una nueva amenaza económica al anunciar su intención de renegociar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) antes de su revisión programada para 2026, informó The Wall Street Journal. Según fuentes citadas por el medio, el republicano busca modificar aspectos fundamentales del acuerdo, en particular las reglas automotrices, con el objetivo de obligar a plantas del sector a trasladarse de México y Canadá hacia territorio estadounidense.
Desde su llegada al poder el lunes pasado, Trump ha señalado que el 1 de febrero impondrá aranceles del 25% a productos provenientes de México y Canadá, justificando la medida por el “ingreso masivo de migrantes y fentanilo” a Estados Unidos desde estos países.
Estrategia comercial y política de Trump
Vigente desde 2020, el T-MEC regula más de 2 billones de dólares en comercio entre las tres naciones de América del Norte. El tratado fue una versión modernizada del original TLCAN de 1994, renegociado a petición de Trump durante su primer mandato.
Ahora, Trump pretende “reiniciar” el acuerdo, según comentó el senador Kevin Cramer, republicano por Dakota del Norte. “No creo que haya ninguna duda de que habrá un reinicio del T-MEC”, afirmó Cramer, quien agregó que los aranceles podrían evitarse si Canadá y México aceptan ajustes al tratado.
En el caso de Canadá, Trump también exige un mayor compromiso en el gasto militar para la OTAN y medidas más estrictas contra el contrabando de fentanilo. “Esperamos que respondan con la suficiente rapidez y contundencia como para evitar los aranceles por completo”, expresó el legislador.
Reacciones de México y Canadá
La Presidenta Claudia Sheinbaum llamó a mantener la calma y analizar el desarrollo de los decretos firmados por Trump. “El T-MEC se mantiene y las consultas para su actualización están previstas en 2026. Evaluaremos paso por paso, sin adelantarnos”, señaló en conferencia matutina.
Sheinbaum enfatizó que el decreto de Trump, llamado “Política Comercial Estados Unidos Primero”, incluye un apartado sobre posibles acciones relacionadas con el fentanilo, lo que, según la mandataria, subraya la necesidad de diálogo constante con el Gobierno estadounidense.
Por su parte, el Primer Ministro saliente de Canadá, Justin Trudeau, indicó que su administración está preparada para cualquier escenario. “El enfoque de Donald Trump genera incertidumbre”, declaró Trudeau. Sin embargo, calificó al republicano como un “hábil negociador” que busca desequilibrar a sus socios para obtener ventajas.
Impacto potencial en la región
La postura de Trump pone en riesgo uno de los acuerdos comerciales más importantes para América del Norte. Además de las posibles modificaciones al sector automotriz, los aranceles del 25% impactarían áreas clave como la agricultura y las manufacturas, sectores en los que México y Canadá son socios estratégicos para Estados Unidos.
El senador Bill Hagerty, republicano por Tennessee, calificó como “terriblemente ingenuo” que México y Canadá perciban las amenazas de Trump como simples tácticas de negociación. “El Mandatario estadounidense tiene claro su objetivo de priorizar la producción en su territorio, incluso si eso significa presionar a sus socios comerciales”, aseguró.
Panorama para los próximos meses
La tensión comercial y política entre las tres naciones podría escalar en las próximas semanas, especialmente con la imposición de los aranceles anunciados para febrero. Sin embargo, expertos señalan que una renegociación anticipada del T-MEC podría abrir un nuevo capítulo en la relación trilateral, con desafíos importantes para las economías de México y Canadá, que dependen en gran medida del comercio con Estados Unidos.