Los dos militares muertos esta semana en Cotija, Michoacán, no sufrieron un ataque directo de los cárteles unidos, sino al detonar una mina improvisada sembrada por los grupos criminales. Fuentes del gabinete de Seguridad nos aseguran que ese tipo de artefactos improvisados son colocados por los grupos delincuenciales en las inmediaciones de sus bodegas o laboratorios para protegerlos de grupos enemigos. En este caso, nos relatan, los militares que iban en búsqueda de un campamento con hombres armados, en su desplazamiento encontraron tres cuerpos desmembrados y al caminar por el área activaron el explosivo rústico. De este modo, nos hacen ver, aunque es un hecho grave, no se trató de un desafío abierto a las Fuerzas Armadas.
Aunque hace pocos días se dijo “muy emocionado” de llegar a México como embajador de Canadá, Cameron MacKay ayer rehuyó a la prensa en la develación de la placa de la nueva embajada de Estados Unidos en nuestro país. El señor MacKay evitó acercarse con los representantes de los medios para dialogar sobre el T-MEC y el estado actual de las relaciones bilaterales entre México y su país. Nos recuerdan que su antecesor, Graeme Clark, criticó la reforma judicial y causó molestia en el expresidente de México, y quizá ahora el embajador canadiense mejor prefiere guardar silencio.
Por fin se le hizo al panista Ricardo Anaya: llegó a la presidencia… pero no a la de la República, sino a la provisional con la que inició los trabajos de la Comisión Permanente en el Congreso de la Unión. Aunque fuera por cinco minutos, el senador albiazul lideró la sesión en sustitución del presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, quien por cierto anda en Chicago, y lo hizo durante unos minutos previo a que se eligiera a Sergio Gutiérrez Luna como presidente de la Comisión Permanente. Aunque fue poco tiempo, el acto dejó buen sabor de boca a Anaya, pues el legislador dijo “qué buena forma de regresar a esta Cámara”, tras su efímera participación.
Nos cuentan que, tras revelarse el Índice de Riesgo de Corrupción en compras públicas a nivel federal, en el que el Fideicomiso Universidad Marítima y Portuaria de México (Fidena) salió con los más altos puntajes de presuntas irregularidades en compras, el secretario de Marina, el almirante Raymundo Morales Ángeles, removió al titular, Víctor Pineda Hernández, quien desde agosto es investigado por la Secretaría de la Función Pública por la entrega de un contrato millonario para cámaras de seguridad en las escuelas náuticas de la Marina, que no funcionan. Nos comentan que Pineda Hernández deja a Fidena en medio de una tormenta, pero nos hacen ver que la decisión del almirante secretario Morales manda un mensaje claro de que habrá tolerancia cero a la corrupción.