En un operativo conjunto entre la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Sonora y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos, fue descubierto un narcotúnel que pretendía conectar la ciudad fronteriza de San Luis Río Colorado, en Sonora, con Arizona. Según las autoridades, la construcción aún no estaba terminada, pero ya atravesaba por debajo del muro fronterizo.
De acuerdo con un comunicado de la SSP de Sonora, el hallazgo fue resultado de un operativo de inspección en “puntos críticos” de la frontera, los cuales suelen ser utilizados por organizaciones delictivas para el tráfico de drogas y personas. El túnel fue identificado gracias al uso de drones, que detectaron una zona de tierra removida en el área.
Narcotúneles: una táctica con historia
Este tipo de construcciones clandestinas no son nuevas en la región fronteriza y han sido ampliamente utilizadas por el narcotráfico para evadir los controles de seguridad. Estas tácticas son comúnmente relacionadas con el exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien fue pionero en el uso de túneles para el trasiego de drogas hacia Estados Unidos.
El Chapo, uno de los narcotraficantes más notorios de México, utilizó túneles no solo para el tráfico de drogas, sino también para escapar de prisión. Uno de los casos más recordados fue su fuga en 2015 del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, a través de un túnel de 1.5 kilómetros equipado con iluminación, ventilación y una motocicleta adaptada para desplazarse por las vías subterráneas.
Precedentes en la región
El túnel recién descubierto es parte de una larga historia de construcciones clandestinas entre Sonora y Arizona, una de las zonas más vigiladas de la frontera. Entre 2017 y 2021, la CBP reportó la destrucción de al menos 40 túneles en esa área. Apenas en mayo pasado, se identificó otro narcotúnel en la misma región, según registros periodísticos.
Uno de los primeros casos documentados de narcotúneles en esta frontera ocurrió en 1990, cuando las autoridades estadounidenses decomisaron cerca de una tonelada de cocaína en Phoenix, Arizona. Las investigaciones revelaron que la droga había cruzado por un túnel de 180 metros que conectaba las ciudades de Agua Prieta, Sonora, y Douglas, Arizona. Este hallazgo vinculó por primera vez al Chapo Guzmán con el uso de túneles para el tráfico de drogas.
Hasta el último arresto de Guzmán, en enero de 2016, las autoridades habían desmantelado 194 túneles utilizados por el narcotráfico mexicano, según la cadena Univisión. Aunque no todos estaban directamente relacionados con el exlíder del Cártel de Sinaloa, la mayoría se localizaban en ciudades estratégicas para sus operaciones.
Una táctica en evolución
A pesar de estar encarcelado y condenado a cadena perpetua en Estados Unidos, el legado de Guzmán en el narcotráfico persiste. Según investigaciones periodísticas, además de los túneles, el Chapo también utilizó tácticas como ocultar drogas en latas de chiles a través de la empresa La Comadre, una estrategia detallada en el libro Chapitos: radiografía criminal de los herederos del Cártel de Sinaloa, del periodista José Luis Montenegro.
El reciente hallazgo en San Luis Río Colorado evidencia que los narcotúneles siguen siendo una herramienta clave para el crimen organizado, adaptándose a los controles fronterizos y representando un desafío constante para las autoridades de ambos países.