Agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) incautaron 333 mil 634 pastillas de fentanilo que estaban ocultas en cajas de pastelitos en el punto de entrada de Nogales, Arizona, frontera con Sonora, México. El hallazgo, ocurrido el pasado 24 de noviembre, forma parte de las acciones de inspección rutinarias realizadas en esta zona limítrofe.
De acuerdo con el director del puerto fronterizo, Michael W. Humphries, las autoridades identificaron el cargamento ilícito en el interior de un automóvil que transportaba varias cajas de madera en la parte trasera. Las cajas contenían charolas de repostería decoradas con listones y moños, simulando un pedido para una fiesta. Sin embargo, al realizar una inspección más detallada, los agentes encontraron que, debajo de los cupcakes, había bolsas con cientos de miles de pastillas de fentanilo azul y paquetes rectangulares con la misma sustancia en polvo.
El peso del fentanilo en polvo incautado fue de 10.5 kilogramos (23.15 libras). La persona que conducía el vehículo fue detenida y puesta a disposición de las autoridades correspondientes para enfrentar un proceso penal federal. Su identidad no ha sido revelada.
Segundo aseguramiento de fentanilo en la misma fecha
El mismo 24 de noviembre, en el puerto de entrada de Mesa de Otay, en California, otro cargamento de fentanilo fue incautado. En este caso, un hombre de 31 años que intentaba cruzar hacia Estados Unidos a bordo de una camioneta SUV modelo 2008 fue detenido tras una inspección en la que un binomio canino del grupo ‘K-9’ detectó narcóticos en el vehículo.
Los agentes encontraron 30 paquetes de fentanilo, con un peso acumulado de 97.5 kilogramos, ocultos en compartimentos de la carrocería, las puertas y la llanta de refacción. El detenido fue entregado a la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) para iniciar el proceso judicial correspondiente.
Preocupación por el incremento del tráfico de fentanilo
Ambos aseguramientos subrayan la creciente sofisticación de los métodos utilizados por los grupos criminales para contrabandear fentanilo a territorio estadounidense. Este opioide sintético, 50 veces más potente que la heroína, ha causado una grave crisis de salud pública en Estados Unidos, donde las muertes por sobredosis relacionadas con esta droga han ido en aumento en los últimos años.
La CBP reiteró su compromiso de fortalecer los operativos en la frontera para evitar que este tipo de sustancias llegue a las comunidades estadounidenses, resaltando el papel clave de los equipos especializados y la tecnología de inspección avanzada en la detección de narcóticos.