La posible reelección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos ha puesto en alerta a los banqueros internacionales, quienes advierten sobre un “reinicio” de la globalización impulsado por las amenazas de aranceles comerciales y un posible enfoque desregulatorio en el sistema financiero estadounidense.
En declaraciones recientes, Trump anunció su intención de imponer un arancel del 25% a productos de México y Canadá, además de un 10% a bienes provenientes de China, desde el primer día de su segundo mandato. Estas medidas han generado preocupación por las posibles disrupciones en las cadenas de suministro globales y el impacto que podrían tener en el crecimiento económico mundial.
Efectos en el comercio y el sistema financiero
Tanuj Kapilashrami, director de Estrategia y Talento de Standard Chartered, afirmó durante la Cumbre Bancaria Global del Financial Times que estas políticas comerciales podrían afectar las relaciones globales, pero también abrir oportunidades para bancos en regiones como Asia y Medio Oriente, que podrían llenar los vacíos en los mercados afectados.
En Europa, Piero Cipollone, miembro del Consejo del Banco Central Europeo, advirtió que los aranceles propuestos por Trump podrían reducir el crecimiento económico y aumentar las tensiones inflacionarias en los 20 países que utilizan el euro.
Por otro lado, existe la preocupación de que una segunda presidencia de Trump genere una ola de desregulación financiera en Wall Street, afectando la implementación uniforme de las normas del “Basilea Endgame”, diseñadas para proteger al sistema bancario mundial de crisis futuras.
Competencia entre bancos europeos y estadounidenses
Los banqueros europeos temen que los cambios en Estados Unidos refuercen aún más la ventaja competitiva de los bancos norteamericanos, que ya disfrutan de mayores márgenes de rentabilidad. Un estudio de la firma Álvarez & Marshal mostró que los márgenes netos de interés de los bancos estadounidenses son del 1.8%, frente al 1.2% de sus homólogos europeos.
C.S. Venkatakrishnan, presidente ejecutivo de Barclays, destacó la importancia de mantener una implementación coordinada de las normas internacionales para evitar desigualdades competitivas: “Nos dejamos llevar y nos fijamos en las personalidades, pero Estados Unidos es un país de grandes y fuertes instituciones que sabe que tiene un papel importante en el mundo”, afirmó.
Impacto global de la política comercial de Trump
Los posibles aranceles no solo tendrían implicaciones para la economía estadounidense, sino que también podrían alterar las relaciones comerciales con socios clave como México, Canadá y China. Esto podría aumentar los costos de producción, afectar los flujos comerciales y desacelerar el crecimiento en mercados emergentes altamente dependientes de las exportaciones hacia Estados Unidos.
Aunque algunos banqueros consideran que las instituciones estadounidenses podrían moderar las políticas más disruptivas, la incertidumbre sobre el futuro del comercio global y las regulaciones financieras sigue generando preocupación en los mercados internacionales.
Con estas tensiones en el horizonte, los próximos meses serán clave para determinar si el sistema bancario global puede adaptarse a una posible reconfiguración de las reglas del comercio y la regulación financiera bajo un nuevo mandato de Donald Trump.