Hace apenas tres días, el gobernador Durazo afirmaba con seguridad que su presupuesto era muy conservador y ponderado. Incluso aseguró que no subiría los impuestos durante su administración. Pero al parecer, sus palabras se las llevó el viento.
Al leer el documento que el viernes pasado recibió el Congreso, el paquete económico 2025, nos encontramos con cuentas muy optimistas y, sorpresa, tres nuevos impuestos “cedulares”.
El impuesto cedular entra en la categoría de impuestos estatales, dado que se grava únicamente en ciertos estados de la República Mexicana y corresponde al pago de personas físicas por obtener ingresos a partir de distintas actividades.
Sonora se sumará a un pequeño grupo de estados que cobran estos impuestos, junto a Chihuahua, Guanajuato, Guerrero, Nayarit, Oaxaca, Quintana Roo y Yucatán.
De acuerdo con el Artículo 43 de la Ley del Impuesto al Valor Agregado, los estados donde se aplica el impuesto cedular pueden establecer una tasa del 2% al 5% para esta contribución. En el caso de Sonora, será del 3.5%.
La propuesta consiste en gravar los ingresos de las personas físicas, subdivididos por tipo de ingresos:
- Prestación de servicios profesionales.
- Otorgamiento del uso o goce temporal de bienes inmuebles.
- Enajenación de bienes inmuebles.
Es relevante destacar que los contribuyentes deben reportar estos ingresos al fisco, aunque no residan en Sonora. Si, por ejemplo, usted tiene alguno de los tipos de ingresos mencionados, pero vive en la Ciudad de México, aun así debe aportar este impuesto por esos ingresos que provienen del estado donde se aplica el impuesto cedular.
Si a esto le sumamos la categoría de “enajenación de bienes inmuebles”, queda claro que el impuesto busca recaudar de los empresarios que especulan con la burbuja inmobiliaria que hay en Hermosillo.
Pongamos un ejemplo:
Imagine que trabaja en Sonora y tiene ingresos brutos de $20,000.00 mensuales por prestación de servicios profesionales. Sus deducciones autorizadas corresponden a $2,831.00 de ISR y $520.00 de seguro social. La tasa del impuesto cedular es del 3.5%.
La fórmula para calcular el monto aproximado de su impuesto cedular es:
(Ingreso mensual – Deducciones autorizadas) x Tasa del impuesto
El cálculo quedaría así:
- Resta $20,000.00 – $2,831.00 – $520.00 = $16,649.00 (tu base de pago).
- Multiplica tu base de pago por la tasa del impuesto: $16,649.00 x 3.5% = $582.72.
Es decir, deberá pagar $582.72 adicionales por el nuevo impuesto cedular.
Entonces, la pregunta es inevitable:
¿Por qué nos miente el gobernador?