A Claudia Sheinbaum le corresponde hacer su presentación ante la comunidad financiera internacional. En los mercados se da por entendido que las reformas constitucionales, entre las que destaca la Reforma Judicial, son herencia política de Andrés Manuel López Obrador; sin embargo, el Paquete Económico 2025 es la señal que esperan los inversionistas para identificar el nivel de responsabilidad que tiene el nuevo gobierno.

Este viernes 15 de noviembre es la fecha límite para que la Secretaría de Hacienda presente el Presupuesto de Egresos del siguiente año, en el que se busca “estirar la cobija” al máximo para dar cobertura a los proyectos que se prometieron en campaña. A su vez, se pretende cumplir el compromiso de reducir la deuda, debido a que las calificadoras de riesgo crediticio se encuentran atentas para otorgar una perspectiva negativa al país y avanzar en la posible baja de la calificación.

Según fuentes de Hacienda, el monto total de gasto que se considera para el 2025 es de entre 8.5 y 9 billones de pesos, para dar cobertura a las nuevas becas educativas, al programa de salud casa por casa y a la homologación de salarios para mujeres, profesores, médicos y policías. Están considerados, además, los casi 800 mil millones de pesos que corresponden a los programas que heredó la nueva administración de López Obrador.

Si en realidad se quiere alcanzar la meta de llevar el déficit fiscal al 3%, los ingresos presupuestarios deberán ser del orden de los 8 billones de pesos, lo que significa un monto adicional de 700 mil millones con respecto a la bolsa con la que se contó en 2024. La idea es obtener esos recursos del cobro de créditos fiscales a las grandes empresas, las cuales, según sus cálculos, todavía adeudan unos 2 billones de pesos.

La presión que se vive estos días en Palacio Nacional es extrema, sobre todo porque en la planeación financiera llevan prioridad las necesidades de gasto que transmite la subsecretaria de Egresos, Bertha Gómez Castro. Al resto del equipo corresponde buscar los recursos para cumplir con lo solicitado, aunque en algunos casos las fuentes de ingreso no sean tan probadas. Ante dicho escenario, en Hacienda empiezan a considerar nuevos impuestos; por ejemplo, en la reactivación de la propuesta para gravar las ganancias extraordinarias de los bancos, las herencias y a los multimillonarios.

Este jaloneo ha desgastado la relación de Ramírez de la O con su jefa Claudia Sheinbaum, quien en los últimos días ha estrechado vínculos con la subsecretaria de Egresos, Betha Gómez, y con el jefe del SAT, Antonio Martínez Dagnino, para tratar los temas de recaudación. El secretario de Hacienda ha empezado a mandar mensajes políticos, como el que envió a los legisladores el martes en su comparecencia sobre una reforma fiscal. Por su parte, la Presidenta está convencida de que un apretón fuerte al gasto será un freno para la economía en su primer año de gobierno.

Así que no se descartan nuevos amagos de Ramírez de la O sobre una posible renuncia, pese a que su compromiso expreso fue el de mantenerse en el cargo por dos años completos. Por lo pronto, el secretario juega sus fichas para restarle poder a Martínez Dagnino con la reinstalación de la Subsecretaría de Ingresos en la que aterrizará en breve Carlos Lerma. El 4 de septiembre adelanté en estas Historias de NegoCEOs sobre las intenciones de Ramírez de la O por recuperar dicha Subsecretaría para sobreponerse al SAT y, ahora se sabe, también para otros fines que comentaré en otra columna.

Posdata 1

Se presentó la segunda parte del Plan Nacional de Energía en lo respectivo al sector de hidrocarburos, sin muchas novedades, o por lo menos sin grandes expectativas de un cambio profundo en Pemex.

Pese a que el objetivo, según se dijo en la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, es rescatar a la empresa, no se expusieron las guías con las que se busca darle la vuelta financieramente, ni cómo se va a resolver la deuda con sus proveedores, cercana a los 20 mil millones de dólares, de acuerdo con el consejero de Pemex, Lorenzo Mauricio Meyer, ni tampoco cómo van a entrar de lleno a la transición energética.

El director de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, reveló un plan de austeridad con el que se busca reducir el gasto en 50 mil millones de pesos, supuestamente para sanear las finanzas de la compañía. La propuesta es simplificar su estructura para volver a centralizar el poder, de manera que se integrarán sus 40 subsidiarias.

En lo relativo a deuda financiera, de alrededor de 100 mil millones de dólares, el subsecretario de Hacienda, Edgar Amador, dijo que buscarán que Pemex ya no recurra a los mercados internacionales para refinanciar sus pasivos de corto plazo.

No se detalló a profundidad los planes de convergencia hacia las energías renovables, salvo que se pretende desarrollar un marco normativo sobre bioenergéticos y combustibles limpios. Por otro lado, sí se enfatizó que la apuesta será a la refinación de combustibles, con acento en la todavía muy incipiente producción de la refinería de Dos Bocas.

Según el director de Pemex se buscarán aplicar nuevas técnicas de exploración para consolidar la producción en 1.8 millones de barriles diarios, muy lejos del sueño de Andrés Manuel López Obrador de llegar a los 3 o 4 millones de barriles diarios.

Posdata 2

Tras la reelección de su líder sindical, Ricardo Aldana Prieto, hace unos días y con el aval de más de 57 mil trabajadores (82% de la votación), este jueves se va a inaugurar el Centro de Capacitación y Adiestramiento del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).

Aldana Prieto estará acompañado por el director general de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, con quien aparecerá por primera vez en un acto público. La relación del sindicato petrolero con la empresa paraestatal será de lo más importante para poder llevar a cabo la transformación de la que se habló este miércoles en Palacio Nacional.

Posdata 3

En lo que va de la actual Legislatura se han realizado cerca de 47 reformas a la Constitución. Una auténtica aplanadora de los legisladores morenistas y sus aliados. Anoche se aprobó una de las que tiene más sentido: la de dotar a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC), que encabeza Omar García Harfuch, de instrumentos jurídicos que permitan su participación en la investigación de los delitos, mediante las modificaciones al artículo 21 constitucional.

Otra de las más relevantes es la ampliación del catálogo de delitos graves, que incluye la prisión preventiva oficiosa en casos de defraudación fiscal, la cual, según fuentes de la Cámara de Diputados, va a “suavizarse”, pues como lo ha reconocido el coordinador de los morenistas, Ricardo Monreal, es “muy fácil de configurar” y podrían cometerse muchos abusos. Lo mismo con lo concerniente al narcomenudeo.

Ya veremos cómo queda dicha iniciativa que, sin duda, va a aprobarse esta misma semana. La que sí se pateó para la siguiente semana será la reforma para desaparecer a los organismos autónomos.