El Instituto Nacional Electoral (INE) se prepara para organizar los primeros comicios en México en los que los ciudadanos elegirán a más de 800 cargos judiciales, entre jueces, magistrados y ministros. La elección, programada para el 1 de junio de 2025, representa un reto logístico y financiero inédito para el organismo.
La presidenta del INE, Guadalupe Taddei, señaló que, aunque la institución está trabajando intensamente para cumplir con el plazo establecido, ha solicitado una prórroga de 90 días al Congreso de la Unión con el fin de realizar el proceso con mayor tranquilidad. Sin embargo, la posibilidad de que el Legislativo, dominado por Morena, otorgue esta ampliación es incierta.
“El INE está trabajando para que se pueda realizar el 1 de junio, pero podría beneficiarse de tiempos más tranquilos. Si la ampliación no ocurre, ajustaremos los tiempos necesarios, incluso capacitando mañana, tarde y noche”, declaró Taddei en una entrevista.
Un proceso histórico y complejo
En esta elección, los ciudadanos recibirán hasta seis boletas para votar por diversos cargos judiciales. En total, se elegirán 39 puestos, incluyendo jueces, magistrados, ministros de la Suprema Corte y del Tribunal de Disciplina Judicial. Taddei explicó que el número exacto de candidatos dependerá de las listas que envíen los tres poderes de la nación al Senado.
“Nuestra tarea es explicar a la población por qué tiene que votar y qué va a elegir. Esta reforma busca garantizar el acceso a una justicia pronta y expedita, comenzando con la elección de juzgadores”, destacó la consejera presidenta.
Ajustes presupuestarios y críticas
El INE solicitó originalmente un presupuesto de 13 mil millones de pesos para llevar a cabo el proceso, pero la mayoría legislativa de Morena ha exigido una reducción significativa, posiblemente a 9 mil millones de pesos.
Taddei afirmó que la institución está evaluando opciones para ajustar los costos sin comprometer la calidad del proceso electoral. “No demeritar la calidad es nuestra premisa. Defenderemos el presupuesto con argumentos técnicos y logísticos”, aseguró.
Controversias y divisiones internas
El INE enfrenta críticas desde distintos frentes. La oposición acusa a Taddei de ser cercana al gobierno de Claudia Sheinbaum y Morena, mientras que dentro del propio instituto existe una división en torno a su liderazgo.
En relación a los señalamientos, Taddei aseguró que “la autoridad electoral siempre será acusada de estar de un lado o del otro. Eso no afecta mi desempeño ni la toma de acuerdos”.
Además, las nuevas atribuciones que otorgan a la presidenta facultades unilaterales para designar titulares de direcciones han generado polémica. Sin embargo, Taddei señaló que estas medidas buscan garantizar que el INE no quede paralizado por la falta de consensos.
“Lo correcto sería encontrar un punto medio que privilegie la colegialidad y no incline la balanza hacia una sola decisión”, indicó.
Expectativas de participación
El INE estima que entre 5 y 20 millones de ciudadanos podrían participar en esta histórica elección judicial, aunque Taddei reconoció que el nivel de participación dependerá en gran medida de las campañas de difusión y promoción que implemente el instituto.
Finalmente, aseguró que el INE entregará resultados preliminares el mismo día de la jornada electoral, al menos para los cargos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “El INE tiene el compromiso de hacer su trabajo de manera profesional y garantizar la participación ciudadana en este proceso sin precedentes”, concluyó.