Nos comentan que detrás de la mampara del templete en el salón Tesorería de Palacio Nacional, en donde todos los días la presidenta Claudia Sheinbaum ofrece sus mañaneras, hay un funcionario federal que jala los hilos, marca los tiempos y está muy pendiente para salir a escena en caso necesario, como de hecho ocurrió en la primera conferencia del sexenio, cuando corrió para avisar que tenían que firmar un decreto frente a las cámaras. Se trata, claro está, de Jesús Ramírez Cuevas, quien fue vocero presidencial en el sexenio pasado y actualmente es coordinador de asesores de la Presidencia de la República. Don Jesús, nos detallan, se coloca ahí, entre bambalinas todos los días. Sus cercanos afirman que está ayudando en lo que “se foguea” el nuevo equipo de Comunicación Social, pero otros afirman que está ahí para cuidar los intereses del que ya se fue y, al mismo tiempo, como recordatorio constante de que en realidad no se fue del todo. ¿Quién tendrá la versión precisa?

El que no aguantó ni la primera oleada de críticas por su propuesta de dialogar con los narcos fue el legislador morenista Manuel Espino, quien al ver que su idea fue rechazada desde todas las bancadas, intentó hacer creer que EL UNIVERSAL había faltado a la verdad, pero el teatrito no le duró porque resulta que la entrevista publicada en este diario está grabada en su totalidad. Fiel a sus convicciones, esas que pasan sin rubor del foxismo al peñismo y al lopezobradorismo según van llegando al poder, don Manuel decidió irse por la más baja y tratar de poner la culpa en el reportero que lo entrevistó. La realidad es que mandó a uno de sus asistentes a proponer “negociar un desmentido”, porque “la cabeza estaba muy fuerte”. Y la realidad es que dijo lo que dijo, que no es la primera vez que propone algo similar y que no tuvo los arrestos para sostener sus palabras cuando vio que no fueron bien recibidas. Total, que Espino se quiso comer la tuna pero se espinó la mano y no aguantó.

Nos hacen ver que en los próximos días el Tribunal Electoral podría resolver el escrito enviado por el INE para que se pronuncie sobre las suspensiones judiciales que ordenan frenar la organización de la elección del Poder Judicial. Nos hacen ver que el tribunal no tendría competencia para manifestarse sobre los amparos y las suspensiones relacionadas emitidas por jueces de circuito y similares. Sin embargo, ante la premura del proceso, nos comentan que el proyecto de Felipe de la Mata podría dar la sorpresa. ¿Será que ya no hace falta que la aplanadora de Morena reforme la Constitución para dar a los magistrados las facultades que van haciendo falta?

Nos comentan que luego de que el exgobernador de Tabasco, Carlos Manuel Merino, fue designado titular de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), se viene otra serie de nombramientos de gobernadores que dejaron o dejarán su cargo este año, como Cuauhtémoc Blanco, Cuitláhuac García y Rutilio Escandón, quienes entregan sus estados en ruinas en lo que toca a la seguridad pública pero que aun así esperan premio. Basta con revisar las noticias de los primeros días del sexenio para confirmar cómo entregan Tabasco, Morelos, Veracruz y Chiapas. ¿Será cuestión de méritos o más bien de necesidad de refugio político?