¡El avión, el avión! No. Se trató de un helicóptero del Ejército ondeando una bandera blanca y sobrevolando Culiacán. Circuló un video y las teorías “volaron”… en redes sociales. Desde que las Fuerzas Armadas anunciaban la rendición del crimen organizado, hasta que la propia SEDENA era la que solicitaba la paz. No faltó el ocurrente que mencionó que se trataba de un ejercicio militar en toda forma.
Pedro Ferriz Híjar, comunicólogo, quien alguna vez anunció su intención de ser candidato independiente a la Presidencia de la República, quien lo mismo comunica información o bulos, decidió hacer lo segundo. Sin checar las fuentes de la información, solo teniendo en cuenta el video en cuestión, el viernes se lanzó a decir que el Ejército se rendía ante el crimen organizado y que, ya entrados en gastos, Sheinbaum de una buena vez pasara a entregar la banda presidencial…
Momentos después, el Ejército informó que el sábado iniciaba la Liga Mexicana del Pacífico de Béisbol y que esto era parte de un ensayo de lo que sería su participación en la inauguración. Acto seguido se dio una constante y generalizada rechifla sobre la poca seriedad del comunicólogo, a la cual —debo decir— me sumé dando uno que otro “like” a críticas que se le hicieron… Sus mensajes fueron tachados de humillantes para la industria de la información y para él mismo como persona. Lo tiene merecido por necio.
Pero más humillante, al fin y al cabo, es que el video tuviera eco —para bien y para peor— porque era creíble, ¡porque podía ser verdad! No lo fue, es cierto, pero el asunto es que no habría sido sorpresa que así hubiese ocurrido… Grave, ¿no?
Pero aquí el punto central de mi columna el día de hoy: al final de cuentas, que Ferriz Híjar la riegue o no es irrelevante; solo lo marca como un comunicador poco confiable. Lo que sí preocupa y es verdaderamente humillante son las constantes humillaciones —valga la rebusnancia— de las que ha sido objeto el morenismo y que siguen llevando a cabo ahora con su ‘segundo piso’. Y lo que lo hace más grave: si únicamente se trataran de humillaciones o metidas de pata personales, nos podríamos reír. Pero sus humillaciones significan problemas para México o muestran la mentira, la hipocresía y/o el abierto cinismo de los que dicen gobernar.
Veamos algunas:
- Humillante es que Rubén Rocha, “gobernador” de Sinaloa, juró y perjuró que el día que asesinaron al Dr. Héctor Melesio Cuén (su archienemigo político) y que se llevaron —quién sabe quiénes— al Mayo Zambada a Estados Unidos, él estaba en Los Ángeles, California. Mintió; las investigaciones y los documentos de ese país muestran que Rocha no estuvo allá. Total, que no salió de México ese día. ¿Por qué mentir?, ¿a quién le tiene tanto miedo? Él solito se enredó en una situación delicada, grave y, sí, verdaderamente humillante. Lo que pudo ser una falsedad inocua, muestra ahora serias interrogantes y dudas.
- Otra. Pedir perdón a nombre del gobierno de lo que pasó en 1968. Un perdón por demás extraño, pues todos estos años se señaló al Ejército como el culpable de dicha matanza, ¡pero ahora ni siquiera se le mencionó! , como si no hubiese tenido nada que ver. Lo más humillante fue que, ese mismo día, el Ejército ultimó a unos migrantes en Chiapas y no hubo disculpa formal por parte del gobierno. ¿Tendremos que esperar 46 años para que haya un acto de constricción?
- Humillante con creces, la farsa sostenida en el Senado para destruir la carrera de verdaderos jueces y magistrados. Todo para incrustar a los incondicionales del régimen. Usar una tómbola muestra el desprecio absoluto a la preparación y solo busca el ridículo, el ruido y, sí también, una jugarreta muy torva de ciertos senadores de Morena (ya llegaré a ello en mi siguiente contribución).
- Humillante usar el azar. Eso es lo más mediocre que puede haber. Particularmente cuando existen —lo sé ¡porque les pagamos sus sueldos con nuestros impuestos!— mecanismos, individuos (de sus capacidades no estoy tan segura) e instituciones establecidos para seleccionar a los mejores perfiles. Ayer, ni la tómbola ni las pelotas las supieron utilizar los “legisladores” de manera correcta… Humillante de en serio.
- Humillante al punto del vómito que mejor desaparecieron SEGALMEX a recuperar los más de 16 mil millones de pesos faltantes por corrupción… Lo mismo por cuanto al INSABI.
- Otra humillación es la doble moral que tiene este régimen y sus corifeos (Sabina Berman entre llos) cuando se trata de las mujeres en nuestra nación: al dibujante que, con ayuda de la inteligencia artificial, manipuló fotos de Andrea Chávez (exhibidas por ella misma en Instagram), lo señalaron. Pero que “El Fisgón” dibujara la cabeza de la ministra presidenta Norma Piña como cena de Sheinbaum y López Obrador no ameritó ni una sola palabra de CONDENA. ¿De verdad no vieron que además se trata de una apología a la decapitación? Así como la que le propinaron al ex alcalde de Chilpancingo…
- Humillante que sigan usando de cortina de humo el tema de Cristobal Colón y el perdón solicitado al monarca de España. ¡Ya chole! Con perdón o sin él, hay cosas muuuuuuucho más importantes y urgentes que resolver; la mayoría de ellas producto de la 4t. Que pongan a Claudia Sheinbaum insistiendo en el asunto muestra que no tienen ninguna intención de rendir cuentas sobre las verdaderas humillaciones, tragedias y vejaciones que sufre el pueblo de México. ¿Verdad Acapulco?
- Humillante para las fuerzas públicas de seguridad que, en lo que va del sexenio (ayer se cumplieron doce días), se han registrado 1,000 —¡MIL!— muertos por violencia. Humillante, pero menos humillante que el que las madres buscadoras tengan que realizar un trabajo que NO hace el gobierno, o que mejor las recibiera el rey de España para darle visibilidad a sus agravios. López Obrador nunca quiso hacerlo. ¿Cuándo las recibirá Claudia? ¿Ocurrirá?
- Humillante defender a Evo Morales. Decir que se trata de “un hermano”. El ex presidente de Bolivia es acusado de estupro, trata y tráfico de menores. En mi opinión bastaba con ver su “guardia” conformada por niñitas… DELEZNABLE, además de humillante. ¿Las altas esferas del gobierno claudista no se da cuenta que debe poner distancia de por medio?
Hay de humillaciones a “humillaciones”. Lo que hace Regeneración Nacional es una humillación constante de las que sí cuentan.
Ya podrán burlarse oficialistas y seguidores de la pifia de Pedro Ferriz, mas lo triste y lo verdaderamente humillante es ver la situación financiera, de violencia, de falta de salud y de educación en la que tienen sumido a nuestro país. Y encima dicen que López Obrador ha sido “el mejor presidente de la historia”…