La cancelación de un evento en el Autódromo Cerro Colorado de Hermosillo, Sonora, tomó por sorpresa a las autoridades y asistentes tras un ataque armado en el estacionamiento. La víctima, un hombre no identificado, recibió múltiples disparos mientras se encontraba en su vehículo pick up Chevrolet Cheyenne.
Los hechos ocurrieron el 27 de octubre alrededor de las 14:38 horas, según el reporte oficial de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora. Testigos entrevistados por la Fiscalía indicaron que los agresores, aún desconocidos, huyeron en una camioneta blanca de modelo reciente luego de disparar contra la víctima.
El vehículo de la víctima, con placas de Baja California, quedó en el estacionamiento con múltiples impactos de bala en el parabrisas. Agentes periciales encontraron indicios balísticos que apuntan al uso de armas calibre nueve milímetros.
La víctima falleció cuarenta minutos antes de la carrera de El Trozadero, un evento de automovilismo programado para ese día en el Autódromo Cerro Colorado. Según información compartida por autoridades y medios locales, la camioneta en la que viajaba la víctima recibió al menos 35 disparos.
No obstante, alrededor de las 17:30 horas, la página oficial del recinto compartió un breve comunicado en el que advertía la suspensión de la carrera. “Por causas ajenas al autódromo se cancela el evento programado para el día de hoy. Atte. Gerencia”, señalaba el aviso.
Datos compartidos por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) señalan que entre enero y septiembre de 2024, el estado de Sonora acumuló un total de 863 homicidios dolosos.
En este plazo, el mes con un mayor número de casos fue julio, con 120, seguido de junio (113), septiembre (107), mayo (93), abril y agosto (con 90 casos cada uno).
Precisamente en el mes de julio se puso en marcha un Mando Único Policial con el que la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal asumió todas las labores enfocadas en proteger a la ciudadanía en el municipio de San Luis Río Colorado, debido a que los grupos criminales habían rebasado a las autoridades locales.
Para finales del mes de septiembre, esta medida ya se había extendido a Sonoyta, Benito Juárez y Huatabampo debido a la debilidad de las corporaciones municipales para hacerle frente a los homicidios y privaciones de la libertad.