El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, enfrenta una investigación por parte de los órganos de inteligencia del gobierno federal debido a sus presuntos vínculos con la facción de Los Chapitos, del Cártel de Sinaloa, según información obtenida por Proceso. El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y los servicios de inteligencia militar han mantenido una vigilancia estrecha sobre el mandatario morenista, ante la sospecha de que ha tomado partido por este grupo criminal, traicionando a la facción de Ismael “El Mayo” Zambada, en medio de la creciente violencia que azota al estado.
El gobernador, que ha sido un aliado cercano de Adán Augusto López, presidente de la Junta de Coordinación Política en el Senado, se encuentra en una situación crítica al llegar a la mitad de su mandato. De acuerdo con los documentos de inteligencia consultados por Proceso, Rocha Moya y su hijo, José Rocha Ruiz, estarían involucrados en operaciones con Los Chapitos a través de altos funcionarios del gobierno estatal, como José Carlos Cárdenas Mellado, titular del Servicio de Administración Tributaria de Sinaloa (SATES), quien habría sido designado en su cargo por el propio gobernador.
La investigación detalla que Rocha Moya ha incrementado las medidas de seguridad, durmiendo en el Palacio de Gobierno y siendo protegido por un equipo especial de la Guardia Nacional y la Marina, debido al temor de sufrir un atentado. Esta vigilancia se intensificó tras la captura de “El Mayo” Zambada y el asesinato del exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Héctor Melesio Cuén, quien también fue un aliado clave del gobernador. Según los informes, la violencia desatada entre las facciones del Cártel de Sinaloa ha paralizado la capital del estado y generado pérdidas económicas millonarias.
Además, el informe señala que la Fiscalía General de la República (FGR) ha tomado cartas en el asunto, atrayendo la investigación sobre el homicidio de Cuén y el secuestro de “El Mayo”. Mientras tanto, la violencia sigue afectando la vida diaria en Culiacán, donde los enfrentamientos han provocado el cierre de comercios, la suspensión de clases presenciales y el temor generalizado entre la población.
Con información de:
Proceso