Nos cuentan que por poco y el Senado hace la omisión del año. Nos recuerdan que, como le informamos en este espacio, los senadores quedaron tan cansados de sus dos sesiones del martes y miércoles que decidieron tomarse una semana de descanso y regresar a sesionar el próximo miércoles, después del Grito de Independencia. Sin embargo, ya que muchos senadores de la 4T andaban disfrutando del puente patrio, les avisaron que debían regresar a la Ciudad de México para la sesión de hoy donde se hará la declaratoria de constitucionalidad de la reforma judicial para que el presidente López Obrador la promulgue el domingo. Nos recuerdan que sólo con esa formalidad puede promulgarse y publicarse en el Diario Oficial de la Federación. ¿Se le pasó al presidente del Senado, a Gerardo Fernández Noroña? y eso que esa noche dijo, muy orondo: “Te cumplimos, México”. ¿No le llegó la señal de que el “regalo” que tanto se esmeraron en darle a su líder incluía ese paso para vestirse de gloria el mero 15 de septiembre?
Hace unos días en este espacio les adelantamos que Chocolates Rocío, propiedad de los hijos mayores del presidente López Obrador, anunciaban la venta de monedas de chocolates con el diseño del escudo mexicano incompleto. Nos detallan que, en su sucursal en la Ciudad de México, a metros de Palacio Nacional, ya se venden estos chocolates, los cuales se pueden adquirir solo si se compran con la caja que contiene una botella de tequila “Reserva Especial” y que tiene un costo al público de 2 mil pesos y no se venden por separado. Más allá del costo, que solo los fifís y machuchones pueden sufragar, ¿la Secretaría de Gobernación les jalará las orejas por violar la ley de símbolos patrios?
Nos cuentan que mañana se está convocando a panistas a manifestarse frente a la sede nacional del PAN, en contra de la errática conducción de Marko Cortés como dirigente, que los llevó a la reciente debacle electoral y con cacicazgos locales que controlan los padrones. Nos comentan que, si bien puede ser una movilización genuina de blanquiazules por los indefendibles resultados, también hay quienes dentro del equipo del michoacano ven la mano negra de Morena y el gobierno federal, que busca poner los últimos clavos al débil ataúd de la principal oposición. Nos hacen ver que suena más a justificación porque esos clavos ya estaban y los colocó el propio Marko, y los martillaron los Yunes.
Nos hacen ver que la batalla por la dirigencia del PRI aún no tiene ganador. Si bien el INE invalidó las modificaciones a los estatutos, será el Tribunal Electoral la instancia que tendrá la última palabra sobre la legalidad de la reelección de Alejandro Moreno como dirigente del partido. Allí entrarán las impugnaciones interpuestas por los expresidentes del tricolor Enrique Ochoa, Dulce María Sauri y Pedro Joaquín Coldwell, entre otros actores que buscan impedir la permanencia de Alito al frente el partido. Hay quienes piensan que el tribunal le permitirá al campechano salirse con la suya porque a Morena le conviene un PRI con una dirigencia desprestigiada. Pero hay quienes dicen que desde el gobierno andan pidiendo saldar cuentas con él por no haber cooperado con la reforma judicial. ¿Harán caso los magistrados a alguna de las dos peticiones?
