Ni 24 horas pasaron, y ya se dio un choque en la bancada de Morena en la Cámara de Diputados. Nos hacen ver que la noche del domingo el diputado morenista y vicepresidente de la Mesa Directiva, Sergio Gutiérrez Luna, anunció que diputados y diputadas de Morena habían presentado una solicitud de juicio político en contra de la jueza y el juez que otorgaron una suspensión que impedía que la reforma al Poder Judicial presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador fuera discutida. Sin embargo, horas después, por la mañana de ayer, el coordinador de la bancada de Morena, Ricardo Monreal, dijo que las querellas contra los juzgadores se hicieron a título personal y pidió a sus diputados poner pausa a esa ofensiva legal. Nos hacen ver que las declaraciones de Monreal dan cuenta de que algunos miembros de su bancada, liderados por Gutiérrez Luna se le fueron por la libre y pidieron el juicio político, pese a que su coordinador quería actuar con mayor prudencia. Bien dicen algunos legisladores morenistas que la única oposición que les preocupa es la de sus propios compañeros.
Después de que el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, dio a conocer las preocupaciones de su gobierno sobre la reforma judicial del presidente López Obrador, que le costaron que el mandatario lo pusiera en pausa (cualquier cosa que eso signifique), el diplomático ofrecerá hoy una conferencia en su residencia. Nos hacen ver que, se ha advertido a los medios que don Ken únicamente hablará del legado de Abraham Lincoln y de Benito Juárez, y no tiene previsto tocar el tema de la reforma al Poder Judicial, en especial de la elección de jueces por medio del voto popular. Esta aparición del embajador Salazar se da también después de que López Obrador durante su informe sometió a votación a mano alzada su propuesta de que los jueces sean electos por el voto del pueblo y cuando sus simpatizantes levantaron la mano en señal de aprobación, el mandatario dijo que ese mensaje debería ser entendido por los Estados Unidos. Ya se verá si luego de su conferencia de hoy el Presidente vuelve a poner en “play” al embajador, o lo mantiene en pausa hasta el fin de su mandato.
El domingo en la sección VIP del Sexto y último Informe de gobierno del presidente López Obrador en el Zócalo, causó sorpresa ver a dos gobernadores de oposición estar sentados muy cerca de Claudia Sheinbaum, presidenta electa, y entre gobernadores de la autollamada Cuarta Transformación. Se trata de la panista Teresa Jiménez, gobernadora de Aguascalientes; y del priista Esteban Villegas, gobernador de Durango. Este último gobernador ya no es noticia que se lleva de piquete de ombligo y le lanza vivas al mandatario federal cuando va a su estado. Sin embargo, la presencia que llamó más la atención fue la gobernadora panista quien fue colocada en primera fila muy cerca de la próxima presidenta. Nos hacen ver que las señales son de que habrá una buena relación entre ambas mandatarias.
En el seno de la Junta de Coordinación Política del Senado se tomó la decisión de incrementar el número de comisiones legislativas para pasar de 57 a 60, y cuyo reparto entre las fracciones parlamentarias se hará de acuerdo con el porcentaje de escaños obtenidos. El tema, nos hacen ver, es muy relevante, pues presidir cada comisión implica un presupuesto extra para las bancadas. Morena tendrá bajo su responsabilidad 31 de esas comisiones, además de que busca quedarse con las presidencias de las más importantes y determinantes en los procesos de las reformas que se avecinan. En las últimas horas se está dando una pelea por esas comisiones, y será hoy cuando se integren cada una de las comisiones legislativas. Nos dicen que si usted quiere ir a lo seguro apueste a que Morena y su casi mayoría calificada se quedará con las más relevantes.