En su recorrido rumbo a la inauguración de un acueducto y un distrito de riego, el Presidente Andrés Manuel López Obrador y la próxima Presidenta Claudia Sheinbaum son interceptados por trabajadores del Poder Judicial en Vícam Pueblo. Los manifestantes, afectados por la reciente reforma que cancela la carrera judicial y pone a votación popular los puestos de jueces, magistrados y ministros, pidieron dialogar con los mandatarios pero no fueron escuchados.
La reforma, impulsada por el gobierno de López Obrador como medida contra la corrupción, ha generado malestar entre los trabajadores del Poder Judicial quienes aseguran que la cancelación de la carrera judicial y la imposición de hacer campañas y ganar votos para ascender, solo beneficia a los políticos y no a los pobres como era su objetivo original.
“Señor, usted es un mentiroso. No somos traficantes de influencias. El Poder Judicial estaba constituido para que los pobres llegáramos a jueces. No para que llegaran los Luján y los Monreal, eso es lo que usted quiere. Quiere Luján, a los Monreal, a los Taddei quiere de jueces”, gritó un hombre a López Obrador, quien viajaba en una camioneta junto a Sheinbaum, quien asumirá el cargo el próximo martes. A pesar de los reclamos, los mandatarios no bajaron las ventanillas para dialogar con los manifestantes.
Los trabajadores también se dirigieron a Sheinbaum, gritando que querían un diálogo con ella y que confiaban en su gobierno, sin embargo, tampoco pudieron hablar con ella ya que no bajó la ventanilla de su auto. En las redes sociales se han difundido videos de la protesta que reflejan el descontento de los trabajadores del Poder Judicial y su solicitud de diálogo con las autoridades.