El Gobierno español ha decidido no asistir a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como Presidenta de México el próximo primero de octubre en Ciudad de México, en respuesta a la exclusión del Rey Felipe VI en la lista de invitados. La Secretaría de Relaciones Exteriores de México había invitado a todos los países excepto Ecuador y Perú, pero el Gobierno de España consideró de “inaceptable” no incluir al Monarca en la lista de invitados.
El descontento del Gobierno español se debe a que el Rey Felipe VI asistió a la toma de posesión de Andrés Manuel López Obrador en 2018, pero a lo largo de su sexenio el Presidente mexicano ha atacado al Monarca e incluso le exigió pedir perdón por la conquista. Además, en marzo el propio López Obrador reconoció que las relaciones con el Rey no eran buenas y afirmó que su Administración no permitió que empresas españolas “consentidas o favoritas” operaran en México, lo que habría generado la molestia del Monarca.
Tras la victoria de Sheinbaum en las elecciones, López Obrador dijo que la virtual Presidenta tendría la oportunidad de “reactivar la relación con España”. Sin embargo, el Gobierno de España ha decidido no asistir a la toma de posesión como represalia por la exclusión del Rey en la lista de invitados. La ausencia de España marca un nuevo capítulo en las tensas relaciones entre ambos países, que se han visto afectadas por la postura del Gobierno mexicano hacia la Corona española.