El secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, se ha destacado en su carrera en el mundo financiero por el conocimiento que tiene de los mercados. En todos estos años el funcionario ha adoptado una de las características que más preocupan a los inversionistas: la volatilidad.
Esta semana ha corrido el rumor de que Ramírez de la O le presentará su renuncia a Claudia Sheinbaum una vez que entregue el paquete económico para 2025, la Ley de Ingresos y el Presupuesto, como reacción a la imposibilidad de colocar a sus perfiles cercanos en los puestos clave de la Secretaría.
Lo preocupante del asunto es que la fuente visible de esos rumores es la propia Secretaría de Hacienda, además de los dichos que el secretario sigue emitiendo en diversas reuniones, a pesar de que la Presidenta electa ha salido al paso ante la opinión pública para clarificar que “Rogelio se queda”.
No es la primera vez que el doctor en Economía por la Universidad de Cambridge amaga con renunciarle al movimiento de la 4T. A Andrés Manuel López Obrador se lo hizo durante este sexenio en dos ocasiones, sin contar que se negó a asumir desde diciembre de 2018 el puesto a pesar de la invitación expresa. Al relevo tuvieron que entrar en su momento Carlos Urzúa y Arturo Herrera.
En el 2022, Ramírez de la O consideró poner su renuncia sobre la mesa; en la primera de ellas, con la redacción de una carta de dimisión que sí llegó a su destino, pero que no fue aceptada por López Obrador. El agravio que reclamó el secretario fue la filtración que hizo el Presidente respecto al incremento en la tasa de interés del Banco de México durante su participación en la Convención Bancaria.
Era marzo de ese año y ante la gravedad de los hechos, por adelantarse el titular del Poder Ejecutivo a informar un incremento de 50 puntos base en una tasa de interés, Ramírez de la O presentó su renuncia. Los mercados y políticos de oposición pedían a gritos su cabeza y éste intentó actuar en consecuencia.
Con la negativa de AMLO a escoger a un cuarto secretario de Hacienda para su gobierno, ese mismo mes Ramírez de la O tuvo que descartar ante los medios de comunicación su posible renuncia, aunque sí se encargó por lo menos de transmitirle a sus cercanos que la idea de abandonar el barco se mantenía permanentemente en su cabeza.
Luego, el secretario tuvo que enfrentar una prueba todavía más férrea: los sobrecostos de los proyectos prioritarios; en especial los de Rocío Nahle y la construcción de la Refinería Olmeca en Dos Bocas. La entonces secretaria de Energía calculó que el complejo petroquímico costaría 8 mil millones de dólares y la cuenta ha llegado a los 20 mil millones de dólares. Ramírez de la O siempre apostó por cerrarle la llave.
Lo mismo pasó con el Tren Maya, aunque en este caso trató de no hacer evidente su descontento por la inversión de 500 mil millones de pesos. Se asegura en su equipo cercano que por la buena relación que pretende mantener con el Ejército, aunque tampoco es partidario de que el total presupuesto de seguridad lo manejen los militares, pues advierte serios indicios de opacidad.
Todo lo anterior avivó en septiembre, también de 2022, los rumores de un nuevo intento de renuncia, que en este caso no llegó a materializarse. Según ha expresado el secretario, el próximo 30 de septiembre entregará una nueva renuncia, a la espera de ser ratificado. Pero futura jefa parece no estar en el ánimo de desecharlo, especialmente porque debe cumplir la promesa de reducir drásticamente y en el primer año el elevado déficit fiscal, aquel que le impuso López Obrador y Ramírez de la O aceptó.
Posdata 1
Antes de terminar su mandato, el presidente Andrés Manuel López Obrador envío a la Cámara de Diputados una iniciativa que amplía el catálogo de armas de uso exclusivo del Ejército, endurece su control y permite la portación de armas a integrantes de empresas públicas y órganos autónomos como Pemex, el SAT y Banxico, y también daría luz verde para que ejidatarios, comuneros y jornaleros utilicen con libertad los artefactos.
Con dicha iniciativa quedaría reformada la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos y se daría certeza jurídica para que las personas ejidatarias, comuneras, sucesoras, pequeños propietarios, avecindados y jornaleras del campo, así como pueblos y comunidades indígenas y afromexicanos puedan portar pistolas, rifles y escopetas para la protección de sus bienes. Una locura.
Las armas que se permitirían usar en un México sumergido en una crisis de violencia son pistolas semiautomáticas de calibre no superior al .380 y su equivalente 9×17 mm o 9mm Short o 9mm Kurz, así como rifles .22 y escopetas de cualquier calibre, salvo las de un calibre superior a 18.5 mm.
Posdata 2
En pocos días se confirmará a Francisco Almazán Barocio como nuevo titular del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), tal cual adelantamos esta semana.
El funcionario es uno de los más cercanos al futuro secretario de Seguridad y Protección Ciudadana federal, Omar García Harfuch, pues fue su sucesor en la jefatura de la Policía de Investigación (PDI) de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, la cual encabezó de octubre del 2019 al 4 de septiembre pasado, cuando presentó su renuncia.
La posición que aún no se define es la del titular de la Unidad de Inteligencia Financiera. Se dice en el equipo de transición que no hay prisa por nombrar a un nuevo director y que por lo pronto se mantendrá a Pablo Gómez al frente. No obstante, la próxima semana podría haber humo blanco, aunque el nue titular no sería anunciado antes de la toma de protesta de Claudia Sheinbaum.
Posdata 3
Ayer dimos cuenta de las advertencias del exsecretario de Hacienda, Alejandro Werner, en torno a la posible recesión en la que caería México en 2025.
Y ahora fue el Bank of America, cuyos analistas publicaron un informe en el que expusieron que la incertidumbre generada por la reforma al Poder Judicial, así como la que pretenden desaparecer los organismos autónomos, «afectarán la inversión», lo que aumenta el riesgo de una recesión técnica en México.
El banco estadounidense alertó que analistas e inversionistas se han mostrado preocupados por la actividad económica debido al débil desempeño de la economía, que junto con un panorama desalentador para la inversión y la necesidad de una consolidación fiscal han incrementado la probabilidad de una recesión técnica en el país.
El consenso de analistas prevé un aterrizaje suave en Estados Unidos; sin embargo, hay una probabilidad significativa de que México entre en una recesión técnica sin que haya una fuerte desaceleración económica en nuestro principal socio comercial.
El Banco prevé que la economía de México crezca 1.1% en 2024 y 0.8% en 2025, lo cual están por debajo del consenso. Analistas consultados por Banco de México prevén que el PIB se expanda 1.6% este año y 1.5% en 2025.