Imane Khelif derrotó a la italiana Angela Carini en tan solo 46 segundos durante los octavos de final del peso welter en los Juegos Olímpicos de París. Carini se vio obligada a abandonar el combate tras recibir un potente puñetazo en la nariz.
Khelif, quien fue descalificada en los Campeonatos del Mundo de 2023 por incumplir las normas de elegibilidad de la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), fue declarada elegible para competir en París por el COI, que ahora dirige la competencia de boxeo tras retirar el reconocimiento internacional a la IBA.
La argelina entró en la pista entre vítores de los aficionados que ondeaban banderas de Argelia. Carini, que mide seis centímetros menos que Khelif, se dirigió a su entrenador a los 30 segundos del combate para ajustarse el casco, pero tras reanudar brevemente, decidió abandonar el cuadrilátero.
“He honrado a mi país con lealtad”, dijo Carini con lágrimas en los ojos. “Esta vez no lo conseguí porque no podía seguir luchando”. Añadió que sintió un fuerte dolor en la nariz tras el segundo golpe y decidió poner fin al combate.
En algunos deportes se han limitado los niveles de testosterona permitidos en las atletas femeninas, mientras que otros prohíben la participación a quienes hayan pasado por la pubertad masculina. El boxeo está dirigido por el COI, que no ha actualizado las normas de elegibilidad y sigue utilizando las aplicadas en Juegos anteriores.
El COI ha despejado el camino para que Khelif y otras atletas como la taiwanesa Lin Yu-ting, quien perdió su medalla de bronce en los Mundiales del año pasado, puedan competir en los Juegos. “Se trata de personas reales”, declaró Mark Adams, portavoz del COI. “Han competido y siguen compitiendo en la competición femenina. Han perdido y han ganado contra otras mujeres a lo largo de los años”.