Carla Humphrey, consejera del Instituto Nacional Electoral (INE) y esposa de Santiago Nieto, extitular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y figura cercana a Morena, defendió la asignación de diputaciones y senadurías por representación proporcional en un contexto donde el partido oficialista y sus aliados lograron la mayoría calificada en el Congreso. Humphrey afirmó que la decisión se basó en un análisis profundo y en el estricto cumplimiento de la Constitución, negando haber cedido a presiones externas.
Sin embargo, sus nexos con Morena han generado escepticismo sobre su imparcialidad. Críticos señalan que Humphrey, siendo parte de un entorno político favorecido por las decisiones del INE en esta materia, podría estar actuando en concordancia con los intereses de Morena, lo que pone en duda la objetividad de su postura.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Humphrey reconoció que la discusión sobre la conformación del Congreso se polarizó y cayó en lo que ella calificó como “falsos debates,” lo que resultó en una serie de amenazas y presiones a través de redes sociales y correos electrónicos. Aseguró que no se dejó influir por estas presiones, insistiendo en que su decisión fue tomada con base en la legalidad y la normativa vigente.
Pese a sus declaraciones, las dudas persisten. Humphrey es vista por algunos como una figura que podría estar defendiendo más los intereses de Morena que los principios de neutralidad del INE, especialmente dado su vínculo con Santiago Nieto, un destacado miembro del entorno morenista. Esto ha llevado a cuestionamientos sobre si su defensa del proceso es genuina o simplemente verborrea para justificar decisiones que benefician al partido en el poder.
El escepticismo también se alimenta de su rechazo a las acusaciones de sobrerrepresentación, un tema central en la controversia. Humphrey sostuvo que la sobrerrepresentación está permitida y regulada por la Constitución, y que ningún partido superó los límites establecidos. Sin embargo, sus críticos argumentan que estas interpretaciones legales podrían estar alineadas con los intereses de Morena, creando una sombra sobre la verdadera independencia de sus decisiones.
Mientras Humphrey insiste en su apego a la ley, el contexto de sus vínculos y la fuerte reacción que ha generado el proceso de asignación de plurinominales invitan a un escrutinio más profundo sobre la imparcialidad de las decisiones dentro del INE y su impacto en la política mexicana.
Con información de:
El Universal