El 26 de julio de 2022 se registró un histórico decomiso de cocaína en la Ciudad de México. Agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) aseguraron un cargamento de más de mil 500 kilogramos de droga que tenían como destino el barrio de Tepito y la ciudad de Los Ángeles, California, en Estados Unidos.
La incautación representó una pérdida de aproximadamente 400 millones de pesos para la célula del Cártel de Sinaloa que estaba a cargo del envío.
Dicho operativo fue anunciado por el entonces titular de la SSC, Omar García Harfuch, como el mayor aseguramiento de cocaína en la historia de la capital. Sin embargo, hubo un detalle que no reveló: el pitazo lo dieron agentes de Estados Unidos.
Así lo revelaron múltiples entrevistas realizadas por José de Córdoba, Santiago Pérez y Steve Fisher, las cuales fueron retomadas para un reciente reportaje de The Wall Street Journal.
La droga salió de Colombia y llegó a México por vía marítima a Puerto Escondido, Oaxaca. Desde ahí, los operadores trasladaron el cargamento en tractocamiones; tenían contemplado dejar una parte en la alcaldía Cuauhtémoc y enviar el resto a la costa oeste de EEUU.
La droga estaba etiquetada con los logos de Tesla y Prada.
El operativo para lograr el aseguramiento de la cocaína se realizó con base en información de inteligencia de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés), lo cual fue una muestra de la cercanía que Claudia Sheinbaum Pardo mantuvo con las fuerzas del orden de EEUU durante su administración como jefa de gobierno de la CDMX.
Oficiales entrevistados para el artículo del WSJ resaltaron la independencia que Sheinbaum tuvo respecto del presidente Andrés Manuel López Obrador en temas concernientes a la seguridad Pública. “El gobierno de la CDMX tuvo una relación más dinámica con jefes de seguridad de EEUU que cualquier otro gobierno estatal del país”, mencionaron las fuentes.
Un vocero de la presidenta electa confirmó que, durante su gestión como jefa de gobierno, tuvo una buena relación con la Embajada de Estados Unidos y espera que el vínculo se mantenga con ella en la silla presidencial.
Por otro lado, agentes de México y EEUU señalaron que García Harfuch —ganador en las recientes elecciones de un puesto en el Senado de la República por la CDMX— proporcionó información de inteligencia a EEUU sobre objetivos prioritarios. Autoridades de aquel país respondieron del mismo modo a su colaboración.
Acorde con la investigación de WSJ, Claudia Sheinbaum inspiró sus políticas de seguridad en la Estrategia de Alto al Fuego de la ciudad de Oakland, California, cuyo objetivo era reducir los asesinatos y tiroteos entre pandillas criminales, disminuir las tasas de encarcelamiento y fortalecer el vínculo entre la policía y los habitantes.
Sheinbaum se reunió en 2018 con la entonces alcaldesa de Oakland, Libby Schaaf, para conocer su programa de seguridad.
Sheinbaum Pardo viajó a Oakland en noviembre de 2018 y se reunió con la entonces alcaldesa Libby Schaaf para conocer más acerca del programa.
Oficiales de seguridad consultados por WSJ coinciden en que uno de los mayores retos de Claudia Sheinbaum como presidenta será alinear las prioridades de ambos países, entre las cuales están capturar a los jefes criminales encargados de traficar fentanilo, reducir el reclutamiento de personas por parte de los cárteles, frenar el mercado negro de armas y detener a los cabecillas de las organizaciones más violentas.