El “voto por voto” de la elección presidencial sólo amplió la ventaja de Claudia Sheinbaum sobre Xóchitl Gálvez. Ganó la elección presidencial con casi 36 millones de votos. Ni López Obrador tuvo tanto apoyo. Su poder es casi absoluto.
La apabullante victoria puso a los morenos y sus aliados —sobrerrepresentación incluida— a las puertas de la mayoría calificada en las dos cámaras. Ayer daban por descontado que alcanzarán los dos tercios de los legisladores que se requieren para modificar la Constitución.
Los morenos y sus rémoras tienen prisa por aprobar, en el Congreso, el famoso plan C, que desmantela las instituciones de la democracia. Ignacio Mier, coordinador de la bancada de Morena en San Lázaro, declaró que en septiembre —último mes de López Obrador en la Presidencia— la nueva legislatura someterá a votación algunas de las reformas constitucionales contenidas en el plan C. Va por delante la que tiene que ver con el Poder Judicial que, entre otras cosas, plantea la elección en las urnas de los ministros, jueces y magistrados.
Dijo Mier: “Están vigentes las iniciativas y está presta la Comisión de Puntos Constitucionales para elaborar el dictamen y que sea votado una vez que se instale el Congreso General (el 1º de septiembre). Platicaremos los senadores y senadoras; diputados y diputadas electas, con nuestra virtual Presidenta y la participación del gobierno saliente, para ajustar el dictamen correspondiente”.
Las palabras de Mier pusieron nerviosos a los mercados. El dólar interbancario volvió a subir. Rondó los 18 pesos, en una jornada muy volátil. El diputado Gerardo Fernández Noroña, PT, habló del tema ante la prensa. Hizo notar que Claudia Sheinbaum ya ratificó a Rogelio Ramírez de la O como secretario de Hacienda, y se comprometió a respetar la autonomía del Banco de México. “Tampoco hay engaño cuando se dijo que habrá reformas muy importantes al marco constitucional. Se necesitan para el plan C. Empezaremos con la del Poder Judicial”, señaló.
La sacudida en los mercados obligó a Sheinbaum, a declarar que, antes de votarlas, habrá un diálogo para revisar las reformas constitucionales. Sugiere, incluso, que haya un “Parlamento Abierto”.
* La desaparición de los órganos autónomos (Inai, Cofece, CRE, IFT) es otra de las reformas contenidas en el plan C del Presidente, que Sheinbaum hizo suyo.
Buscamos a Adrián Alcalá, comisionado presidente del Inai, para que nos diera su opinión sobre lo que se perfila. A reserva de que las autoridades emitan los resultados oficiales para saber si alcanzan la mayoría calificada, nos dijo:
“En el Inai, además de estar trabajando por la tutela de los derechos humanos —acceso a la información y protección de datos personales— estamos abiertos al diálogo y buscamos tender puentes de comunicación y colaboración ante la nueva conformación política de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
“Lejos de pensar en debilitar al Inai, estamos enfocados en ver cómo podemos fortalecerlo. No vemos un México democrático sin una institución autónoma, independiente, que garantice esos derechos. Con esto quiero decir que el Inai no puede estar en la cuerda floja”, puntualizó.
* A la luz de los resultados, la coalición PAN, PRI y PRD fue un fracaso. El tricolor pasó a ser cuarta fuerza política. Sólo tendrá entre 30 y 41 diputados. El PRD está en vías de perder su registro. No alcanzó la barrera del 3% de la votación nacional. El PAN queda como la segunda fuerza parlamentaria con el PVEM pisándole los talones. Bajó su número de diputados de 114 a un máximo de 80.
“¿De qué tamaño es el terremoto?”, se preguntó el senador del PAN, Damián Zepeda. Él mismo respondió con datos: “En la mitad de los estados del país la oposición en su conjunto —PAN, PRI, PRD y MC— ganó cero distritos. En 23 estados ganó un distrito. El PAN ganó más de dos diputaciones federales sólo en cuatro estados de los 32”.
Lamentablemente, esto se traduce en poder absoluto para quien será la Presidenta de la República.
“Con las estimaciones y las reglas que hay, lograrían las dos terceras partes en la Cámara de Diputados y a tiro de piedras de las dos terceras partes en el Senado que, por la historia que he visto, en dos patadas la van a lograr. Eso quiere decir que no habrá ningún contrapeso legal para detener una reforma constitucional. Eso es preocupante y negativo para un país. El único contrapeso que quedará es la autorregulación de la propia Presidenta de la República”.
* Muy concurrido el informe de actividades legislativas de la senadora de MC y próxima diputada federal, Laura Ballesteros, quien coordinó la campaña presidencial del candidato Máynez. Salón repleto. No había un asiento libre. La cúpula naranja estuvo presente. Dante Delgado, dirigente real del partido. Jorge Álvarez Máynez y Salomón Chertorivski, Braulio López, coordinador de los diputados emecistas, y Amalia García. La acompañaron también senadores de otros partidos: Claudia Ruiz Massieu, expriista; Damián Zepeda, del PAN, y Miguel Mancera, del PRD. Laura era suplente de Xóchitl Gálvez, quien ya se renicorporó a sus labores legislativas. Estuvo meses en el Senado. Suficientes para hacerse notar y proyectarse al futuro.