En su reciente columna “El desierto en llamas“, Héctor De Mauleón pinta un desgarrador retrato de la violencia que azota el municipio de Caborca, Sonora. Al amanecer del domingo, dos cuerpos desmembrados fueron encontrados en el tramo carretero Caborca-Y Griega, a la altura del Cerro de la Virgen. Este hallazgo es solo el último episodio en una serie de eventos que subrayan la ausencia de autoridad en la región.
Apenas tres días antes, una cabeza humana apareció en la carretera Caborca-Puerto Lobos, colocada estratégicamente para ser vista por los conductores. Estos hechos, según De Mauleón, demuestran que el gobierno continúa negando la evidente anarquía en esta parte de Sonora.
Los enfrentamientos entre el Cártel de Caborca y Los Salazar, brazo armado del Cártel de Sinaloa, han sido constantes. El 19 de marzo de 2023, una balacera entre estos grupos criminales dejó un saldo de siete muertos y tres heridos en las calles de Caborca, mientras las ambulancias nunca llegaron y las autoridades apenas lograron dos detenciones.
La violencia alcanzó otro pico el 15 de julio de 2023, con 15 secuestros en un solo día y comandos armados que recorrieron libremente las calles. Las autoridades aseguraron armas y vehículos, pero nuevamente, no hubo detenidos. Similarmente, el 21 de enero de 2024, una familia fue privada de su libertad y hallada muerta días después, mientras la madre sigue desaparecida.
El terror no es nuevo en Caborca. En junio de 2020, un centenar de sicarios tomaron la ciudad durante la noche, disparando contra casas, negocios y gasolineras, mientras el Ejército y la Guardia Nacional llegaron demasiado tarde. Al día siguiente, diez cuerpos torturados fueron arrojados en la carretera Caborca-Sonoyta.
Los trabajadores de la minera Fresnillo también han sido víctimas de la violencia. En enero de 2023, hombres armados interceptaron camiones que transportaban personal y les prendieron fuego, enviando un claro mensaje a los propietarios de la mina sobre el pago de “derecho de piso”.
El 1 de mayo pasado, cinco cuerpos fueron encontrados en la carretera Caborca-Y Griega, amarrados, asesinados a tiros y con el rostro cubierto con cinta adhesiva. Este hallazgo se suma a los numerosos episodios de violencia que han convertido a Sonora en una zona de guerra.
El 23 de junio, día en que aparecieron los cuerpos desmembrados en el Cerro de la Virgen, se registraron 101 asesinatos en México, con Sonora ocupando el segundo lugar en homicidios.
Aunque Mauleón no menciona directamente al gobernador Alfonso Durazo, el panorama descrito evidencia el fracaso en materia de seguridad del ex Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana. Durazo ganó su candidatura ofreciendo mejorar la seguridad en el estado, una promesa que claramente no se ha cumplido. Los continuos episodios de violencia en Sonora descuellan la necesidad urgente de una respuesta efectiva y coordinada para combatir la criminalidad y restaurar la seguridad en la región.